Las polémicas por los conciertos pregrabados se destapan cuando el resultado no convence al respetable, pero los promotores insisten en que se trata de fórmulas plenamente aceptadas y que solo buscan mejorar el recital. En el caso de las canciones con más efectos disco de La Unión se introducen efectos para emular el resultado de los compactos. «Lo mismo que pasa con el grupo Dover, hay sonidos pregrabados, pero tocan la guitarra, el bajo y cantan ellas», precisa un representante.
Otra de las fórmulas, de la que habitualmente echa mano la ex de Mecano, es introducir en el recital voces pregrabadas de la propia Ana Torroja. Por último, aluden a fórmulas para aquellos cantantes que se consideran «animadores» en el mundo musical, como Dinio o Leonardo Dantés. «Estos llevan toda la música grabada y cantan o interactúan con el público por encima; ojo, es algo que hacen muchas orquestas a pesar de que lleven músicos de figurantes», asegura otro representante gallego.
Solo el rock se salva
Los grupos de rock son los más ajenos a esta práctica, según desvelan las agencias, que reconocen que en el pop es muy habitual «echar mano de la tecnología».