Tumbonas con cortinas para huir de los curiosos

La Voz

SOCIEDAD

07 ago 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La zona de la playa pública que se intervino ayer argumentando causas de seguridad se encuentra junto a un controvertido club privado, propiedad también de Ricardo Arranz, el dueño del hotel Villa Padierna. Al parecer, las instalaciones presentan irregularidades, como es el hecho de ocupar espacio de uso público. Pero eso ayer no importó y las fuerzas de seguridad españolas, agentes secretos -que, a estas alturas, ya conoce todo el mundo-, guardias civiles en extraños vehículos extraterrestres de seis ruedas y perros policía tomaron la playa para gloria de América.

Michelle Obama supo ponerse a resguardo de los curiosos. Y lo hizo en una especie de tumbona con dosel, rodeada de telas, que daba un poco la sensación de que la primera dama norteamericana tomaba el sol dentro de un probador.

La pequeña Sasha, sin embargo, se lo pasó en grande. Convenientemente untada en crema protectora, se zambulló con sus amigas en las aguas mediterráneas durante más de una hora. Y, en todo ese tiempo, el flanco marítimo estuvo cubierto por un agente vestido con neopreno y por una lancha rápida de la Guardia Civil; divisar el periscopio de un submarino nuclear tampoco estaría fuera de lugar, dada la situación. Miss Obama y sus acompañantes recibieron todo tipo de atenciones por parte de personal del club privado. Pero ella, la verdadera protagonista de este viaje, se cuidó mucho de dejarse fotografiar en paños menores.

Entre las decenas de curiosos que aguantaron al sol hubo quien creyó ver en el tenderete de Michelle a Antonio Banderas. Y es muy posible que así fuera, ya que el actor coorganiza, junto a Eva Longoria, una gala benéfica que se celebra esta noche en el hotel Villa Padierna. A la fiesta está invitada, como no podía ser de otra manera, la primera dama estadounidense. Hasta las cuatro estuvo montado este estudio de cine ambulante con el que viaja la esposa del presidente Obama. A su disposición tuvieron socorristas, refrigerios, guardaespaldas, toallas verdes, litros de crema solar, además de flotadores y juguetes hinchables para las niñas.

Después de un descanso en el hotel que hace las veces de base de operaciones, Michelle Obama y su hija tenían pensado visitar, sobre las 20.00 horas, el parque Selwo Aventura, ubicado también en Estepona. Esta mañana se las espera en Ronda y, el domingo, partirán hacia el palacio de Marivent.