Ayer se anularon tres de cada cuatro vuelos en Europa, mientras el volcán aumentaba su intensidad
18 abr 2010 . Actualizado a las 02:00 h.El mayor caos en la navegación aérea de la historia, superior incluso al generado por el 11-S, llegará hoy a España. Después de la falsa alarma de ayer, en la que Aena decidió a media tarde cerrar siete aeropuertos del norte en previsión de la llegada de la ceniza volcánica procedente de Islandia, medida que se anuló por la noche debido al desplazamiento de las partículas hacia el este, el foco se sitúa ahora en Cataluña y Baleares.
La nube de cenizas se desplazaba anoche hacia estas dos comunidades, adonde llegará probablemente hoy. La situación es excepcional si se tiene en cuenta que en estas dos comunidades se encuentran algunos de los aeropuertos (Barcelona, Girona y Palma) con mayor tráfico aéreo de toda España.
La nube de ceniza trajó ayer de cabeza a las autoridades portuarias españolas. Si ya por la mañana Eurocontrol -el organismo europeo que coordina la navegación aérea- había alertado de la posible llegada de las partículas al noroeste de la Península, las incidencias en los aeropuertos españoles comenzaban prácticamente al mismo tiempo, aun sin haberse posado la nube sobre el cielo español. Como primera medida, Aena bloqueó, por motivos de seguridad, un tramo del espacio aéreo entre Barcelona y Asturias, por lo que fue necesario hacer un desvío más hacia el sur para mantener la operatividad de los vuelos.
Pero el mayor contratiempo llegó por la tarde, cuando Aena, en coordinación con Eurocontrol, anunció, como medida de la precaución, el cierre de siete aeropuertos del norte entre las ocho de la tarde de ayer y las diez de la mañana de hoy: Asturias, Santander, Bilbao, San Sebastián, Vitoria, Pamplona y Logroño, en los que había programadas 22 conexiones. Por la noche rectificó su decisión al comprobar que, por efecto de los vientos, la nube de cenizas volcánica se desplazaba hacia el este.
Los aeropuertos españoles tampoco fueron ajenos ayer al colapso que vive Europa. A lo largo de la jornada se cancelaron 2.384 vuelos con destino o procedencia de un total de 24 países europeos que mantienen cerrado su cielo. Europa estuvo ayer prácticamente incomunicada por aire, ya que se suspendieron 16.000 viajes, lo que supone tres de cada cuatro de los programados. En tres días de caos aéreo se abortaron 41.000 conexiones que dejaron a millones de pasajeros en tierra. La situación también volvió a afectar a Galicia, ya que ayer se anularon cuatro operaciones en A Coruña, otras tantas en Santiago y seis en Vigo.
Blanco pide comprensión
El ministro de Fomento, José Blanco, indicó ayer en Santiago que España seguirá en todo momento las indicaciones de Eurocontrol antes de adoptar cualquier decisión. Blanco pidió comprensión a los usuarios, a los que instó a solicitar información sobre los vuelos cancelados a la hora de emprender viaje, «para evitar acumulación de pasajeros que luego no van a poder volar».
El titular de Fomento se mostró prudente cuando se le preguntó por la posibilidad de que cambien los vientos en las próximas horas y se complique la escena. «No se puede generar una situación sobre una información que no está todavía verificada», puntualizó, para agregar que Aena «irá informando puntualmente en la medida que tenga información».
Mientras tanto, la erupción del volcán islándés aumentó ayer de intensidad, después de que el viernes se relajara.