Casi la mitad de las mujeres que se tratan de cáncer se quedan estériles

Cristian Reino

SOCIEDAD

La infertilidad es uno de los efectos secundarios de técnicas como la quimioterapia, por lo que 200 pacientes con cáncer congelan sus óvulos para poder ser madres.

12 nov 2009 . Actualizado a las 22:51 h.

El cáncer se cobró el año pasado la fertilidad del 42% de las españolas que se sometieron a un tratamiento de quimioterapia o radioterapia. «Que el cáncer se cura es una realidad, pero los tratamientos tienen efectos secundarios, entre ellos que muchos de los pacientes se quedan estériles», señaló este jueves Agustín Ballesteros, director del Instituto Valenciano de Fertilidad (IVI).

Sin embargo, este problema tiene solución. «Es importante que la sociedad sepa que los tratamientos acaban con la fertilidad y que hoy podemos prevenir este efecto secundario», afirmó la presidenta de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) de Barcelona, María Dolores de Oya.

Con este objetivo, el IVI y la AECC han llegado a un acuerdo para que todas las personas que padecen un cáncer puedan someterse de forma gratuita a las últimas técnicas que preservan la fertilidad.

Silvia González, ginecóloga, señala que hay dos tratamientos posibles: «La vitrificación de los óvulos y la preservación del tejido ovárico». «Tras una estimulación ovárica se extraen los óvulos maduros y se guardan vitrificados para descongelarlos cuando superado el cáncer se desee ser madre a través de un tratamiento de reproducción asistida. Esto permite generar embriones, con el mismo porcentaje de éxito que una mujer sometida a programas de reproducción», aseguró González.

En el caso de los hombres, la opción más adecuada para poder ser padre después del cáncer es la criopreservación de una muestra de semen antes del tratamiento, porque, de no hacerlo, las posibilidades de recuperación espermática normal no superan el 20-30%, según Ballesteros.

«El programa de preservación de la fertilidad nació hace un año dentro del IVI. La idea era que a todo aquel que le fuera diagnosticado un cáncer, pudiera preservar sus óvulos o espermatozoides de forma inmediata y gratuita, dándole la posibilidad de ser padre o madre en el futuro», señaló Ballesteros, que dijo que en un año 200 pacientes se han beneficiado de este programa.

Carmina Torán, de 34 años, vitrificó sus óvulos hace un par de meses, después de que le diagnosticaran un cáncer de mama. «Mi marido y yo estábamos buscando un bebé, cuando de repente, de un día para otro, me descubrí un bulto en el pecho», relató este jueves. «Tras diagnosticarme el cáncer, mi ginecólogo me preguntó si quería tener hijos; 'por supuesto', le dije».

«Es muy importante saber que vas a poder ser madre para seguir el tratamiento de quimioterapia, te ayuda mucho; cuando te dicen que tienes cáncer se te detiene el tiempo, la vida, pero si sabes que a la larga podrás tener lo que deseas, una familia, es un gran alivio y una esperanza», señaló. «Afortunadamente, el cáncer ya no es una enfermedad letal en muchos casos y menos todavía en pacientes en edad reproductiva», concluyó De Ova.