El hábito tabáquico de las adolescentes disminuye, pero sigue siendo superior al de los varones.
02 nov 2009 . Actualizado a las 20:28 h.El 14% de los adolescentes de 15 y 16 años son fumadores diarios, aunque el porcentaje es mayor entre las mujeres que entre los varones. Entre 2006 y 2008, el consumo de tabaco entre los chicos de estas edades repuntó del 12,8% hasta el 13,2%.
En las chicas, en este mismo periodo, el hábito tabáquico disminuyó del 15,3% al 14,7%. Estos datos de prevalencia del tabaquismo entre los adolescentes españoles fueron aportados por el doctor Carlos Jiménez Ruiz, jefe de la Unidad Especializada de Tabaquismo de la Subdirección General de Promoción y Prevención de la Salud de la Comunidad de Madrid.
El gran descenso en el consumo de tabaco entre los adolescentes de estas edades se registró entre 2002 y 2006, cuando la adicción a la nicotina descendió considerablemente: del 29,7% al 15,3% entre los chicos y del 20,7% al 12,8% entre las chicas. Entre los fumadores españoles, un 30,4% son adolescentes con las edades mencionadas. El 14% fuma diariamente, el 10,4% en alguna ocasión a lo largo de la semana, el 6% fuma ocasionalmente, el 56,3% no lo hace y el 13,4% son ex fumadores.
Más de la mitad de los adolescentes consigue abandonar el tabaco con ayuda médica, complementando el tratamiento farmacológico con el apoyo psicológico y un seguimiento adecuado.
Los resultados, precisó Jiménez, indican que el respaldo facultativo permite alcanzar datos que pueden considerarse un «éxito». Así, a los tres meses de seguimiento médico, un 72% de los adolescentes consigue abandonar el tabaco; al medio año, los resultados se reducen al 65% y, al año, al 55%, cuando puede determinarse que los adolescentes en cuestión han logrado superar la fase más difícil de su dependencia.
Campaña europea
El porcentaje de éxito es similar al de toda la población fumadora. «Con seguimiento médico y la terapia adecuada, entre un 40 y un 60% de los fumadores consiguen abandonar el tabaco a los seis meses», dijo el doctor Leopoldo Sánchez, jefe del Servicio de Neumología del Hospital Carlos III.
Los datos fueron aportados durante la presentación de una campaña lanzada por la Comisión Europea, bajo el lema HELP, por una vida sin tabaco para prevenir el consumo de tabaco entre los jóvenes. La mencionada campaña de concienciación, que es interactiva, se desarrolla en redes sociales como Facebook y dispone de una web donde mediante cortos de animación y consejos se anima a los jóvenes a no fumar o a abandonar el hábito.
Marta Múgica, responsable de las Relaciones con la Sociedad y Campañas de Comunicación de la representación de la Comisión Europea en España, incidió en que el tabaquismo causa de la muerte de 650.000 personas al año en los 27 países de la UE, lo que supone «la séptima parte de las muertes totales». Además, 19.000 personas mueren al año a consecuencia del tabaquismo pasivo. La campaña, resaltó Múgica, está dirigida a los jóvenes entre 15 y 25 años, especialmente las chicas, y a las personas entre 24 y 34 años. El doctor Sánchez argumentó que los fumadores deben ser conscientes de que su dependencia constituye «una enfermedad crónica que genera, a su vez, otras patologías» y que el hábito tabáquico «adelanta la muerte a más de la mitad de los fumadores». A su juicio, la combinación de medios farmacológicos y psicológicos se ha demostrado eficaz para abandonar la dependencia del cigarrillo.
Subida de impuestos
El endurecimiento de la ley antitabaco previsto por el Ministerio de Sanidad supondrá un «gran beneficio general para la sociedad y, en concreto, para los jóvenes», adujo Raquel Fernández, presidenta de Nofumadores.org. Y es que, argumentó, que los adolescentes no estén expuestos al humo del tabaco en lugares públicos cerrados implicará que descienda el número de chicos y chicas que se inician en el consumo de tabaco. Actualmente, la edad media de inicio al tabaquismo se sitúa en los 13 años. «Los espacios sin humo contribuyen a la desaparición del consumo de tabaco», aseveró. Fernández consideró una 'aberración' que a los menores de 16 años se les permita acceder a lugares de ocio con una superficie menor a los 100 metros cuadrados donde se permite fumar.
«Es esencial corregir esta situación», significó.
Julio César Doncel, vicepresidente de Nofumadores. Org y miembro de la Dirección General de Salud y Consumo de la Comisión Europea, abogó por la subida en los impuestos del tabaco, una medida que, en su opinión, «se ha demostrado eficaz para ayudar a dejar de fumar. Sobre todo entre los jóvenes, dado que su capacidad adquisitiva es menor». Mencionó Doncel medidas económicas en este sentido adoptadas por países de nuestro entorno, como Francia y Reino Unido, «donde la subida de precios consiguió que aumentará la asistencia a centros de deshabituación tabáquica». Otra iniciativa que los expertos consideraron precisa, y que respaldaron abiertamente los doctores Jiménez y Sánchez, es que la Seguridad Social financie los tratamientos farmacológicos para abandonar el tabaco.