La ministra de Educación, Política Social y Deporte, Mercedes Cabrera, acordó ayer con el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, el incremento de la aportación estatal para financiar la aplicación de la ley de dependencia en Galicia. El Gobierno aumentará en 20 millones la partida presupuestada para el 2008, con lo que la cifra total aportada por el Estado este año ascenderá a 67 millones. Para el año 2009, se alcanzó el compromiso de que el Gobierno aporte 80 millones para la dependencia en Galicia.
Según explicó Quintana al término de la reunión, con lo acordado ayer se calcula que un total de 20.000 gallegos recibirán prestaciones por dependencia en el 2008, una cifra que para el 2009 se espera que aumente a 35.000. El vicepresidente gallego explicó que el compromiso asumido ayer por el Gobierno complementa el «gran esfuerzo» de la Xunta para la implantación del «sistema gallego del bienestar». En referencia a la actual coyuntura económica, afirmó que es precisamente en «momentos de crisis» como los actuales «cuando más se necesita» que desde el Estado central se asuma la cofinanciación de la ley de dependencia, para poder «proteger más a quienes más lo precisan». Según Quintana, las «características especiales» de Galicia tienen una incidencia directa en el coste de las prestaciones por dependencia, lo que justifica la decisión de incrementar la financiación acordada ayer.
Fuentes del BNG vincularon esta nueva aportación del Gobierno con la negociación de los Presupuestos y aseguraron que el Ejecutivo decidió sacar estas partidas de la negociación de las cuentas públicas para no complicar la relación con otras comunidades.
De cara al futuro, Quintana trasladó a la ministra una propuesta de modelo de financiación de la ley de dependencia común para todas las autonomías, de manera que se cree un sistema estable y no sea necesario negociar año a año las partidas de inversión estatal.
Frente a la satisfacción por el acuerdo que expresó Quintana, el secretario general del PPdeG, Alfonso Rueda, afirmó que el número dos de la Xunta volvió de Madrid con menos dinero del que pedía en septiembre, cuando cifró en 80 millones de euros la cantidad necesaria para el 2008 y en cien millones la del año próximo.