La laminaria, un alga básica para el ecosistema, desaparece en Galicia

SOCIEDAD

En varios puntos del litoral se han instalado cabos guía para observar su evolución ?a largo plazo

06 nov 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Los bosques no solo desaparecen en tierra, sino que también lo están haciendo bajo el mar. Quienes en los últimos años recorrieron el litoral gallego en uno de esos barcos con el fondo transparente tuvieron ocasión de ver algunos de estos bosques de algas, de la especie llamada laminaria, aunque de forma muy superficial. Era algo habitual, por ejemplo, en el caso de la ría de A Coruña. Los que periódicamente se sumergen en estas aguas han visto cómo en los últimos dos años las algas prácticamente han desaparecido. «Este año ni nació ni brotó un alga, por lo menos en la zona que va de San Amaro hasta la torre de Hércules, que es la que mejor conozco», explica Abel Barreiro, uno de los buceadores asiduos de la zona. Datos similares aportan compañeros suyos también pertenecientes al Club del Mar de San Amaro -«aunque esta es una actividad nuestra, que no tiene nada que ver con el club», matizan-.

Barreiro explica que comenzaron a detectar este problema ya el año pasado, «porque en los meses de junio y julio las algas empezaron a perder la hoja, cuando lo normal es que se mantenga hasta septiembre u octubre».

Uno de los posibles motivos de lo ocurrido lo explica otro submarinista, y biólogo, Óscar Francesch, tras detallar que la desaparición de las algas se extiende desde la espalda del dique de abrigo hasta el faro de Mera, es decir, prácticamente toda la ría de A Coruña. «Han desaparecido porque se las han comido», indica. Y quienes se las comieron fueron los peces salpa, que en la costa gallega también se conocen como saboga. «Son herbívoros y van en bancos de miles y miles de peces; tienen más de dos metros de intestino. He pescado alguno y lo he abierto para ver de qué se alimentaban; su intestino es como el de una vaca», indica Francesch.

En cuanto a las características de este pez también detalla: «Tiene la boca pequeña y los dientes muy cortantes; en su interior se ve cómo va mordiendo las algas y formando medias lunas perfectas». Estos bancos de peces usaban los bosques de algas de la ría coruñesa como un lugar de pasto «y cuando las algas están dobladas y las muerden lo que forman son unos círculos perfectos».

No obstante, otros biólogos, como Pablo Pita, o el buceador Abel Barreiro, sostienen que efectivamente hay bancos de estos peces, pero no los consideran capaces de agotar las algas; por ello achacan la desaparición a otros motivos, como la contaminación o el cambio climático, si bien por el momento no han podido comprobarlo científicamente. Pita argumenta que hace un tiempo «los buceadores del sur de Galicia nos alertaron de que allí estaban desapareciendo, pero ahora parece que vuelven a recuperarse».

Controles de Viveiro a Vigo

El departamento de biología de la Federación Gallega de Actividades Submarinas y el Grupo de Recursos Marinos y Pesquerías de la Universidade da Coruña han puesto en marcha un plan para comprobar la evolución de las densidades de estos vegetales; se trata de un proyecto que cuenta con financiación de Caixanova, al que le han dado el nombre de esta alga: Laminaria. Entre los colaboradores están desde el Parque Nacional de las Illas Atlánticas hasta una tienda coruñesa de buceo, pasando por un astillero y nueve clubes de buceo de toda Galicia.

Responsables de esta iniciativa indicaron que están instalando a lo largo de la costa gallega «una serie de cabos guía permanentes [transectos] fijados con una resina sobre las rocas que contabilizarán la densidad de las laminarias durante un período de cinco años». Estos medidores están ubicados en lugares como el cabo Home, la isla de Ons, la playa de Area, en Viveiro; las islas de San Pedro, en A Coruña; o el Bajo Carrumeiro, en la isla sur de las Cíes. También obtienen imágenes desde satélites y mediante vuelos de aviones.