El Instituto Nacional de Consumo ha retirado del mercado en el mes de enero tres mochilas portabebés de las marcas Jané (referencia 60203), Baby Nurse y El Corte Inglés (referencia 918) por tener defectos de fabricación o irregularidades que ponían en riesgo a los niños.
En los tres casos, las correas de sujeción del bebé son más estrechas de lo reglamentario. Además, todas presentan pequeñas piezas que se desprenden con facilidad -un botón en el caso de la de El Corte Inglés y las etiquetas en las otras dos- y que pueden ser ingeridas por el bebé, con el correspondiente riesgo de asfixia. Además, la mochila de El Corte Inglés tiene un defecto en las aberturas para las piernas, mientras que la de la marca Baby Nurse no lleva las instrucciones necesarias para un uso correcto.
Según Facua-Consumidores en Acción, estos tres productos han sido incluidos en la red de alerta que coordina el Instituto Nacional de Consumo después de que la Comunidad de Madrid notificase que tienen defectos que pueden poner en riesgo al bebé. La mochila de Jané fue incluida en esta lista el 8 de enero; la de Baby Nurse, el día 17, y la de El Corte Inglés, el día 30.
El Corte Inglés ha informado de que, desde noviembre del 2007, no vende la citada mochila portabebés con la referencia 918.?A requerimiento del Instituto Nacional de Consumo, El Corte Inglés decidió retirar de la venta todas las unidades al constatar que algunas de ellas presentaban defectos de fabricación.
Chupetes
También se han retirado varios modelos de chupetes cuyas tetinas se separan con facilidad. Las marcas afectadas son Vidal (referencia 357, lote 02/2007), Saro (referencia 4571) y Bebisana (referencia 407, lote 03/2007). Y otro de la marca Dama (referencia 52112) y un pintalabios (referencia 52053) con forma de caramelo que los pequeños pueden confundir con un dulce. Finalmente, Consumo ha ordenado sacar del mercado el parque infantil Baby Box Rettangolare de la marca Rossidbb porque se desprende la espuma de relleno y las medidas de sus aperturas son incorrectas.
En los primeros días de enero, la empresa Danone ya alertó sobre los posibles riesgos que entrañaba un portachupetes que se entregaba como obsequio con uno de sus productos. Estaba compuesto de pequeñas bolas que podían desprenderse, por lo que se pidió a los usuarios que lo devolviesen.