El estudio del arquitecto Santiago Calatrava aseguró ayer, según ha informado la agencia Efe, que la sentencia que desestima su demanda contra el Ayuntamiento de Bilbao le ofrece «satisfacción moral» porque reconoce que el puente Zubi Zuri es «una obra artística y como tal debe estar protegida».
Calatrava, sin embargo, anunció que recurrirá la sentencia. En el fallo, el juez reconoce que la colocación de la pasarela «ha alterado la integridad» de la «creación artística», pero argumenta que «la utilidad pública» del puente prevalece sobre el derecho a la propiedad intelectual. No obstante, ve «incomprensible» que el Ayuntamiento no haya solicitado a quien diseñó el puente original que participara de los cambios que se iban a realizar en su obra porque podría haberse logrado un acuerdo entre ambas partes.
La empresa Vizcaína de Edificaciones, una de las demandadas por Calatrava, cree que la sentencia «beneficia a los bilbaínos» y confirma que la pasarela de Isozaki se hizo «respetando el puente».