La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, animó ayer a los Gobiernos de Madrid y de Castilla y León a sumarse al Pacto Ibérico por el Lince Ibérico, firmado ayer en Sevilla, y recordó que la conservación de esta especie «no es un lujo», sino una «obligación moral». Narbona presidió la firma de este pacto, suscrito por los responsables de Medio Ambiente de Andalucía, Fuensanta Coves; Castilla-La Mancha, José Luis Martínez, y Extremadura, José Luis Navarro, en presencia de su homólogo portugués, Francisco Nunes, con quien ya se firmó un acuerdo similar el 31 de agosto. El Pacto Ibérico por el Lince amplía el acuerdo andaluz aprobado en abril de 2002, primer pacto institucional suscrito en España para salvar a este felino y al que Narbona expresó su «reconocimiento», pues ha ayudado a que sobrevivan cerca de doscientos ejemplares en Sierra Morena y Doñana.