En España solo se denuncia uno de cada diez casos de maltrato infantil

J. G.

SOCIEDAD

26 sep 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

EL 8% de los niños españoles sufren malos tratos, pero solo uno de cada diez casos se denuncian, según un estudio presentado en el undécimo congreso nacional de psiquiatría. El presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría Biológica, José Giner, afirmó que seguramente se dan más casos de muertes por maltrato de madres a hijos que por violencia sexista, pero los malos tratos a niños emergen menos.

Un informe elaborado por José Sanmartín, director del Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia, destaca que seis de cada diez niños afectados son víctimas de maltrato emocional, un tipo de violencia que se manifiesta en frases del tipo «tú no vales nada» o «qué habré hecho yo para merecer este hijo».

Además, «casi todos los casos de abuso sexual ocurren dentro de la familia», y un 40% de estos menores afectados padecen también malos tratos físico. José Sanmartín indicó que cuatro de cada diez maltratadores habían consumido antes de agredir a niños notable cantidad de droga, alcohol en el caso de los varones, y otras sustancias, en el de las mujeres.

El psiquiatra lucense Francisco Vidal, presidente del comité organizador del congreso, y José Giner se refirieron a la violencia sexista como un problema «básicamente cultural», y atribuyeron a personas de otras culturas que inmigraron al país el aumento de casos que se observa en España.

El distinto valor de la muerte, y sobre todo un sentimiento de propiedad del varón sobre la mujer «como el que había en España hace unos cuarenta o cincuenta años» según José Giner, explican estas situaciones. Hay mujeres de otras culturas que ven «una bofetada de vez en cuando como una manifestación de amor», indicó.

El psiquiatra Felipe Navarro, profesor de Medicina en Alicante, afirmó que la reforma del Código Penal que tramitan las Cortes prevé una ampliación de los supuestos de delitos de violencia sexual y un agravamiento de las penas, por la inquietud social que provocan, pero esa reforma aún no se ha aprobado. En casos como el del violador de Vall d'Hebrón, afirmó que caben medidas de seguridad «pero, si no se han dictado en sentencia, difícilmente se pueden adoptar ahora».

El congreso prevé la participación de unos 2.000 profesionales hasta el sábado.