Julia Otero: «Que el Señor me guarde el sentido común y me aleje del Botox»

La Voz

SOCIEDAD

22 jun 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Dicen que al verdadero gallego se le reconoce porque cuando te lo encuentras en una escalera nunca sabes si sube o baja. Elsa Anka, Pedro Ruiz, Rafael Amargo, Ricardo Bofill, Silvia Tortosa, Juanjo Puigcorbé y Neus Asensi son de esos que, sin haber nacido en Galicia, se sienten a ratos tan gallegos que están dispuestos a superar la prueba de la escalera. Sobre todo, cada vez que se celebra en Barcelona la cena de gala de la Asociación de Empresarios Gallegos de Cataluña, bajo la batuta de Julio Fernández, dueño de la distribuidora Filmax. Durante la velada, amenizada por un grupo de cantantes de ópera formados en el Liceo y ataviados a la manera del siglo XVIII -los camareros llevaban librea y empolvada peluca-, se concedieron los títulos de la Excelencia Gallega a cinco personajes de las artes, la política, la empresa... Gallegos excelentes Luz Casal, galardonada en la categoría de arte, no pudo acudir por estar recuperándose de la quimioterapia a la que se ha sometido tras sufrir un cáncer de mama. La que sí estuvo presente fue Julia Otero, excelencia gallega de la comunicación. Julia, natural de Monforte de Lemos pero criada en Barcelona, eligió para la ocasión un vestido rojo del gallego Adolfo Domínguez. «A la tele volveré -dijo-, pero no voy a operarme para que me ofrezcan un contrato. De momento, tengo todas las arrugas y espero saber envejecer bien. Que el Señor me guarde el sentido común y me aleje del Botox». Neus Asensi acaba de rodar en Valencia Cuerpo a la carta, un telefilme que habla precisamente «de la obsesión de las mujeres por la belleza» y no descarta un arreglillo futuro. «Si algún día hay que pasar por el quirófano, se pasa», adelantó. La actriz catalana comenzará pronto otra película en Galicia en la que hace de camionera. «Llevo un tráiler de 17 metros -explicó- y he aprendido a manejarlo». El acta de los premiados la leyó Pedro Ruiz, quien coincidió con su ex Elsa Anka -con un traje y un marabú de Joaquín Pérez Valette-. También estuvo Ricardo Bofill hijo; no contó nada, pero su orondez parece indicar que sigue fiel a la desintoxicación que se impuso. Llegó con Ana Turpin, su novia, y con la diseñadora Purificación García. Sancho Gracia acudió junto a Blanca Marsillach y Fernando Guillén Cuervo. Sancho confesó ver todos los canales de televisión, «incluido el porno», y dijo que no conoce a la Pantoja. Quien sí sabe de ella, y hablo sobre su recuperación anímica, fue José Manuel Parada, con coleta y sobredosis de Farmatint, quien no pudo resistir la tentación y soltó: «Creo que hace como tres meses que no me enamoro». | arantza furundarena