Avituallamiento erótico

La Voz

SOCIEDAD

MARK TERRILPIED

Hechos y figuras

31 oct 2004 . Actualizado a las 06:00 h.

Fíjense en los corredores. Son algunos de los diez mil que ayer participaron en Frankfurt en el maratón Eurocity. Desconozco el punto en el que está tomada la fotografía, por lo que no puedo determinar cuánto de cansados estaban los corredores. Pero no hay ninguno de ellos que mire al horizonte. Todos han clavado los ojos en la bailarina que, a modo de avituallamiento erótico, se colocó en las calles de Frankfurt a marcarse unos pasos de samba ante los sufridos corredores. Una, que corre poco, se imagina que para afrontar una prueba de estas características, la concentración tiene que ser muy importante. Desde luego, a todos los que iban en ese grupo, ese presunto aislamiento para luchar contra el cansancio se les debió desvanecer ante la inesperada garota . Incluso es más que posible que alguno se desconcentrara más de lo razonable volviendo la cabeza. Un excelente momento para que las participantes femeninas ganaran algunos metros a sus contrincantes, siempre tan fáciles de despistar. ?as manías de Roberto Carlos Seguro que hay algún lector que cree que soy un poco maniática. Es posible, pero, para manías, las de Roberto Carlos . Y no me refiero al futbolista sino al cantante. Tiene tantas que ha decidido someterse a tratamiento psiquiátrico para ver si se deshace de algunas. Por ejemplo, de la que le obliga a salir siempre por la misma puerta por la que entró; no ponerse nunca prendas de color marrón, no firmar jamás ningún tipo de documento cuando la Luna se encuentra en fase menguante o evitar palabras con connotaciones negativas. Sé de un trastorno obsesivo compulsivo como aquel que padecía Jack Nicholson en Mejor imposible , ¿se acuerdan? Por lo que se ve, el cantante brasileño ha mejorado algo desde que inició el tratamiento. Cualquier día lo vemos vestido de marrón. Sobredosis de Halloween Y acabo con el peñazo de Halloween . Entre lo pesaditas que están las famosas calabazas y lo pesaditos que están los anti-halloween, les ofrezco tres fotografías tomadas en lugares muy diferentes que demuestran que la exportación de esta fiesta tan made in USA es imparable. Podemos apelar al Samaín y a cualquier resto etnográfico, pero está claro que cada vez somos más americanos. Al menos estos días.