Carmen Bordiú y el taxi

Alba Díaz-Pachín

SOCIEDAD

STEFANO RELLANDINI

20 oct 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

Les voy a contar la historia del taxi y la nieta de Franco que, a estas alturas, seguro que ya han oído: Carmen Martínez-Bordiú denunció ayer haber sufrido «un trato vejatorio vergonzoso» y «coacciones» de un taxista de Sevilla. Verán, Carmen Martínez-Bordiú procedía de París y subió junto a una amiga en un taxi en el aeropuerto sevillano y al poco de arrancar le pidió que subiese las ventanillas porque llovía a mares, a la vez que le solicitó «por favor» -según la demanda que después presentó en el juzgado- que bajase el volumen de la radio porque no oía los mensajes del móvil. El conductor, dice Bordiú, «puso mala cara, bajó totalmente las ventanillas» y le dijo que si quería oír y hablar, que se fuera a una oficina, «y subió el volumen de la radio». Ella mandó detener el taxi y al pagar descubrió que la nota era de 17 euros, y como ella demostró sorpresa por el precio ante tan poco recorrido, el taxista les retuvo el equipaje. Acabó llegando la policía, los sindicatos del taxi y no vino el abuelo casi de puro churro. Ya saben que en algunos lugares del mundo existen unos bares hechos de hielo. Eso ocurre en zonas donde el agua que congela la mayor parte del año, pero es que ahora la moda ha llegado a la mediterránea y ardiente Italia. En Milán se abrió un bar del estilo hecho todo con bloques traídos del río Torne en Suecia. Vasos, sillas y mesas y por supuesto columnas y paredes tienen el tacto arisco del agua a menos cero. Las copas están frías y los clientes es de suponer que calientes bajo sus trajes especiales. Lo malo es que el bar se derretirá en seis meses. Gallegas en Estados Unidos Luisa Castro y Yolanda Castaño, dos escritoras gallegas con predicamento en nuestra tierra, están estos días en Estados Unidos haciendo sus particulares américas , que tienen mucho de literario y seguramente poco de práctico. En la tierra de las oportunidades leerán poesía, y sabiendo como son, seguro que sorprenden. La temporada vienesa de los tradicionales bailes de salón en trajes de gala y frac comienza este año con el primer «Baile de la belleza» con fragancia y máscaras, en la tradicional fecha del 11 de noviembre, anunciaron ayer los organizadores de la fiesta. La noche promete ser un acontecimiento especial para el olfato y culminará con la concesión del premio «Flair de parfum 2004» de las perfumerías a la mejor fragancia embotellada. En años anteriores estuvieron entre los premiados la cantante de ópera Agnes Baltsa y el cantautor de música pop austríaco Rainhard Fendrich, con residencia en Mallorca. Esta cita es uno de los apertivios para el deslumbrante Baile de la Ópera.