Denuncian «interés personal» de Rouco en el auge de la asignatura de Religión

AGENCIAS | MADRID

SOCIEDAD

La ex ministra Matilde Fernández cree que «forma parte de su carrera mirando a ser papable» Las APA andaluzas proponen que no se envíe a los niños a las clases alternativas

20 jun 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

La decisión del Ministerio de Educación de que la asignatura de Religión compute para pasar de curso en Primaria, Secundaria y Bachillerato ha tenido inmediatas reacciones en contra. Entre ellas, hay quien denuncia un pacto no escrito entre el Gobierno y el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Antonio María Rouco Varela. Una de las personas que se pronunció en este sentido fue la ex ministra socialista de Asuntos Sociales Matilde Fernández, quien dijo: «A mí esto me suena al poder del cardenal Rouco mirando a ser papable». Añadió que la decisión obedece, a su juicio, a «unas estrategias de relaciones públicas de caerle bien al Vaticano y tener como alianza un montón de políticos vinculados al Opus Dei». En el mismo sentido habló el presidente del PNV y ex jesuita, Xabier Arzalluz, para quien la reestructuración educativa forma parte «de las compensaciones, para que Rouco haga lo que le gusta a Aznar». Para Arzalluz esto «significa romper un poco el principio de laicidad atenuada que se expresa en la Constitución. Otras religiones pueden protestar porque no se les dispensa un trato de igualdad». «Huelga» como protesta Las críticas no son las únicas reacciones surgidas por el auge de la asignatura de Religión. Así, la Confederación Andaluza de APA por la Enseñanza Pública (Codapa) exigió al Gobierno central que retire el decreto por «inconstitucional» y animó a los padres que no deseen formación religiosa a no aceptar esta alternativa y que sus hijos «no entren a esas clases». Esta huelga se justifica en que la medida «violenta la libertad de pensamiento y de conciencia que consagra la Declaración Universal de los Derechos Humanos». Reinvertir el dinero Por su parte, el Sindicato de Estudiantes (SE) propuso que el dinero público para financiar el «adoctrinamiento religioso» se destine para mejorar la educación pública y eliminar los conciertos con los colegios privados. El SE augura que la asignatura se convertirá en una maría, con lo que se conseguirá que el número de alumnos matriculados en esta ella sea mayor y que así la enseñanza doctrinaria siga teniendo un «enorme» peso en el sistema educativo. En el Parlamento Por otra parte, el BNG ha presentado una iniciativa en el Congreso de los Diputados para que Educación «desista en su pretensión de convertir la religión católica en una asignatura equiparable al resto». Y el diputado Joan Saura, de Iniciativa per Catalunya, anunció que solicitará al Defensor del Pueblo que interponga un recurso de inconstitucionalidad.