Consigue la recuperación total de algunos enfermos si se administra en las tres primeras horas La Agencia Europea del Medicamento lo aceptó tras varios años de polémica
23 nov 2002 . Actualizado a las 06:00 h.El tratamiento trombolítico contra el ictus isquémico llegará el próximo año a los hospitales gallegos, según los neurólogos. La Agencia Europea del Medicamento lo aprobó en septiembre, y antes de fin de año se prevé que lo haga la Administración española. Esta asistencia se presta desde 1997 en Estados Unidos, pero en Europa se resistió porque su introducción va a obligar a cambios asistenciales en los hospitales, señala José Castillo, presidente de la Sociedad Gallega de Neurología. Este tratamiento, que se administra por vía intravenosa, tiene un costo medio de unos mil euros por enfermo. El problema, según los neurólogos, no es el precio, sino que para ser efectivo precisa ser administrado en las tres primeras horas desde el accidente cerebral. Éso requiere que el enfermo se someta a las pruebas necesarias para si es un paciente idóneo. Beneficio espectacular En caso de serlo, el beneficio puede ser espectacular, pues se ha verificado que en una de cada cinco personas el tratamiento consigue una recuperación excepcional, incluso llegan a desaparecer al cabo de pocas horas los síntomas del mal. El Clínico de Santiago confía en ser uno de los dieciocho primeros hospitales de España en disponer del nuevo fármaco, pues ya realizó ensayos clínicos. La implantación en el resto de los centros será paulatina, previo cursos, y obligará a cambiar las Urgencias, para que disponga de personal y medios las 24 horas. Elevada mortalidad La última semana, neurólogos de todos los hospitales públicos gallegos han asistido en el Clínico compostelano a un curso sobre utilización de un doppler , un moderno aparato para diagnóstico de ictus que es indoloro para el paciente y permite obtener imágenes muy precisas sobre cómo le ha afectado el problema. En España se conoce mejor del ictus desde que lo ha sufrido el duque de Lugo, Jaime de Marichalar. Ahora los neurólogos confían que la nueva normativa, que obligará a que los enfermos sean trasladados de inmediato al hospital y no queden en casa cuando se detecte este problema, ayudará a mejorar la asistencia y a reducir la mortalidad, pues es la primera causa de muerte entre las mujeres y la segunda entre los varones.