17 jul 2002 . Actualizado a las 07:00 h.
El origen de la pasta está lleno de leyenda. Aunque siempre se ha hecho responsable de su importación a Marco Polo, al parecer, eso es fruto de la imaginación. Los historiadores del buen comer creen que la pasta efectivamente llegó de Oriente, pero no se sabe cómo. Sea como fuere, las fabulosas aventuras del mercader han recreado con poesía el nacimiento de un alimento sorprendente. De poesía también está cargado el supuesto origen la forma redonda de los raviolis. Como se narra en uno de los relatos que salpican este tomo de La buena cocina, un posadero que dio cobijo a la diosa Venus en uno de sus viajes por la Tierra quedó prendado de la belleza de su ombligo y decidió inmortalizarlo amasando en redondo la pasta.