Científicos reunidos en Puerto Rico defienden la viabilidad de esta técnica a corto plazo frente a la investigación con células madre Ni las células madre, ni el corazón artificial. La técnica hoy en día más prometedora y realista para la obtención de órganos para el trasplante en humanos es el xenotrasplante. Ésta es una de las conclusiones a las que se llegó en el curso «Impacto de la Genómica en el futuro de la patología humana», organizado en San Juan de Puerto Rico por el Instituto Novartis. El encuentro contó con la participación de científicos como Rafael Máñez Mendiluce, responsable de xenotrasplantes del Hospital Juan Canalejo, quien desveló que el principal reto que se plantea hoy su equipo es probar en humanos el funcionamiento de los órganos de cerdo.
11 mar 2002 . Actualizado a las 06:00 h.
Rafael Máñez Mendiluce, coordinador del programa de xenotrasplantes del Hospital Juan Canalejo, es consciente de que trasladar sus experimentos a humanos (hoy en día los organos de cerdo se trasplantan en primates babuinos) cuenta con una barrera muy importante, como es la legal. Antes de realizar ensayos clínicos en humanos es necesario acreditar experiencia probada en animales, algo que todavía no se ha conseguido del todo.
La principal razón es el rechazo que se produce, que se está intentando evitar en una primera fase mediante la manipulación genética del gorrino, introduciéndole un gen humano y, en una segunda etapa, con un tratamiento con inmunodepresores de gran potencia, lo que provoca aún importantes efectos secundarios en los animales trasplantados.
Fácil adaptación
Pero, si hoy en día la situación es esta, ¿por qué se plantea dar el salto en humanos?. La tesis de Rafael Máñez parte de la evidencia: el rechazo es mayor porque el cerdo reacciona mucho peor en un babuino, que no comparte en su totalidad los genes del hombre.
En un humano, lo más probable, o al menos es lo que indica la evidencia, es que la similitud del trasgen introducido en el puerco con los de la propia persona facilitaría su integración. Pero antes de realizar el experimento de forma directa, lo que se plantean los científicos es buscar la colaboración con equipos de investigación españoles que trabajen con ratones a los que previamente se les han introducido células humanas.
«Sería una nueva línea de investigación, pero complementaria, ya que seguiremos con la que tenemos en marcha. Lo que tengo claro es que, hoy en día, podríamos hacer perfectamente investigación humana».
Actualmente, los experimentos en xenotrasplantes, con los que se persigue la obtención de hígados, corazones y riñones, son mucho mejores que los que se hacían con órganos humanos hace tan solo veinte años. Esto, al menos, es lo que ocurre en el hospital Juan Canalejo de A Coruña, un centro de referencia en xenotrasplantes a nivel mundial.
Los experimentos en xenotrasplantes recibieron, precisamente, el respaldo de los científicos que se reunieron en el curso sobre Impacto de la genómica en el futuro de la patología humana, que se celebró este fin de semana en San Juan de Puerto Rico.
Por un lado, porque la investigación en células madre, muy incipiente, no ha demostrado en absoluto que a partir de este sistema se puedan crear tejidos enteros. «Esta hipótesis es aún ciencia-ficción», apuntó el propio Máñez. Por otro lado, los órganos artificiales, como el corazón mecánico desarrollado en Estados Unidos, se plantean solo como una solución transitoria, no como la definitiva. Además, hasta el momento, tampoco se ha demostrado la eficacia completa de las investigaciones que se han llevado a cabo.