El ochenta por ciento de los antibióticos que consumen los gallegos son innecesarios
SOCIEDAD
SANIDAD Las drogas milagrosas pueden acabar con el milagro si se utilizan mal. La resistencia de las bacterias a los antibióticos, derivada de un uso incontrolado, preocupa ahora a los científicos. Por eso, Sanidad, la Sociedad Española de Quimioterapia han lanzado una campaña para fomentar una utilización responsable de estos fármacos. Los datos que manejan indican que casi el 80% de los antibióticos que se toman en España no son necesarios.
15 feb 2001 . Actualizado a las 06:00 h.Ingerir un antibiótico cuando no está justificada su utilización produce una resistencia a ese fármaco. Se trata de un fenómeno biológico natural que consiste en que las bacterias buscan una forma de luchar contra el medicamento poniendo en marcha una serie de mecanismos que impiden su acción. Un informe realizado este año por la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que cerca del 80% del consumo de antibióticos podría evitarse, lo que frenaría la aparición de resistencias al efecto de los antibióticos. Tratamientos completos La confusión entre bacteria y virus, la automedicación, el almacenamiento de este tipo de fármacos y el incumplimiento de las terapias fijadas por el médico son algunos de los factores que influyen en la aparición de resistencias. Así lo explicó el portavoz de la Sociedad Española de Quimioterapia, Rafael García Riestra, quien participó ayer en Santiago, junto con representantes de la Consellería de Sanidade y de los Colegios de Médicos y Farmacéuticos en una mesa redonda para hablar de la campaña nacional sobre el uso responsable de estos medicamentos. Los españoles consumen más de mil kilos de antibióticos diarios. Esas son las cuentas que han echado la Sociedad Española de Quimioterapia y el Ministerio de Sanidad, quienes estiman que más del 88% de la población utiliza un antibiótico al menos una vez al año. De hecho, durante el pasado año el uso de estas sustancias supuso para la Administración un gasto de 58.000 millones de pesetas, a los que habría que sumar el consumo privado. Mientras los antibacterianos son unos de los fármacos más consumidos por los españoles, en Galicia ocupan el cuarto puesto en número de prescripciones, detrás de los tranquilizantes, los analgésicos y los antiinflamatorios.