Tres estudiantes que acabaron segundo de bachillerato con la máxima cualificación desvelan sus trucos
05 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Cuatrocientos estudiantes de la comarca están preparándose para afrontar, a partir del martes, los exámenes de selectividad. Algunos de ellos parten con la ventaja de haber acabado la etapa en el instituto con la máxima calificación. Tres desvelan los trucos para lograr esas notazas.
«Non hai truco, a clave é organizarse ben»
Con 10 en todas las materias acabó segundo de bachillerato en el Número Un Óscar Servia Hermo (Ribeira, 2004). Asegura que entender bien el temario y no quedarse nunca con dudas ha sido fundamental para obtener esas inmejorables calificaciones: «Non funciono chapando, senón facendo esquema e subliñando». A la hora de dar consejos a otros estudiantes, se limita a señala que «non hai truco, a clave é organizarse ben».
Aunque reconoce que ha tenido que hincar los codos durante todo el curso, Óscar señala que no ha renunciado a nada: «Foi un dos anos máis activos a nivel social. Saín, fun a concertos e quedei cos amigos practicamente todos os fins de semana». Ahora está inmerso en la preparación de los exámenes de selectividad, pero asegura que se lo toma con tranquilidad: «Estou estudando todos os días, porque considero importante ser constante, pero tamén é certo que non me afogo».
Y es que este joven de Ribeira quiere cursar Derecho, grado para el que no se exige una nota alta: «Por esa parte estou tranquilo, aínda que quero conseguir uns bos resultados nas ABAU como mérito persoal». Ya fue ese el objetivo que se marcó cuando comenzó la etapa formativa en el instituto. Tanto en primero como en cuarto de la ESO, Óscar Servia concluyó con un redondo 10 en todas las asignaturas: «Para min é unha recompensa ao esforzo realizado ao longo de todo o ano».
En cuanto pase la selectividad, el joven de Ribeira se tomará unas merecidas vacaciones. Quiere cargar pilas para afrontar con fuerza la etapa universitaria. Su objetivo es licenciarse en Derecho para, en el futuro, ejercer como abogado.
CARMELA QUEIJEIRO
«Tratei de levar ao día todas as materias»
Cerrar un curso con 10 en todas las materias no es fácil, porque es raro que alguna asignatura no entrañe cierta complejidad. En el caso de Jeiko Maneiro (Boiro, 2004), esos huesos duros de roer fueron las lenguas y la Historia: «Foron as que me requiriron máis tempo de estudo». Aún así, sostiene que alcanzar la media máxima en segundo de bachillerato no le resultó especialmente difícil: «Non tiven que renunciar practicamente a nada ao longo do curso». Entre sus aficiones está ponerse en forma en el gimnasio y solo faltó a unos cuantos entrenamientos por culpa de los exámenes durante los últimos meses.
Ni siquiera ahora, cuando está inmerso en la preparación de los exámenes de selectividad, se siente agobiado. La semana pasada acudió a las clases de repaso que se impartieron en su instituto, el Espiñeira, y le dedicó, a mayores, unas tres horas diarias al estudio: «A verdade é que me lembro de moitos dos contidos, o único que teño que machacar son algunhas partes máis teóricas». Y es que Jeiko aplicó durante el curso un truco que le funcionó: «Tratei de levar ao día todas as materias».
El joven hace estos días hincapié en las asignaturas de letras, pues las ciencias, como le gustan, no le requieren tanto esfuerzo. De hecho, tirará por estas a la hora de dar el salto a la universidad. Quiere cursar el grado de Medicina, pero ya tiene en mente una alterativa, Biotecnología. Aún así, confía en tener una media suficiente para acceder a la primera opción. Sería la mejor recompensa al esfuerzo realizado durante el último curso: «Quería sacar boas notas como un mérito persoal, pero tamén é certo que sabía que tiña que apertar se quería acceder a Medicina».
«Es una carrera de fondo, hay que dosificar»
Le queda poco tiempo para solicitar plaza en el grado universitario que quiera cursar, pero Mireya Briones (Boiro, 2004) todavía no tiene claras sus prioridades. Es probable que se decante por Ciencias Sociais, pero ahora está centrada en la selectividad, su próximo objetivo. A la hora de enfrentarse a los temidos exámenes, parte con la ventaja de haber conseguido un 10 de media en segundo de bachillerato, repitiendo las notas que logró en cuarto de la ESO. Asegura que la organización es la clave del éxito: «No hay truco, simplemente, tratar de llevarlo lo mejor posible y no agobiarse. El curso es una carrera de fondo, hay que dosificar y no atropellarse».
La joven boirense explica que no se marcó como reto lograr esas notazas, simplemente surgió: «Quería llevar el curso lo mejor posible y se me dio bien». Ahora que las tiene, señala que le dan tranquilidad a la hora de afrontar las pruebas de la ABAU: «Es un alivio partir con una media alta, creo que no afrontas con la misma presión los exámenes».
Aunque reconoce que estos días está inmersa en los apuntes, puntualiza que lo lleva con tranquilidad: «Estoy repasando con calma y sin agobiarme, tomándome tiempo para descansar, porque no quiero llegar a los exámenes con nervios».
Mireya asegura que no ha tenido que renunciar a nada para firmar la media de 10 en su último año de instituto, pero reconoce que está cansada: «Estoy deseando acabar esta etapa, fue un curso largo, intenso y que requirió un gran esfuerzo, por lo que estoy deseando que pase la selectividad y coger vacaciones». Dedicará los meses de verano a descansar: «Quiero olvidarme de los libros».