La despedida del dueño del Rock Café de Santiago: «Este es mi último aniversario en este templo del rock and roll»

O. S. SANTIAGO

VIVIR SANTIAGO

El establecimiento de la República Arxentina celebró el pasado sábado sus diez años. Fue allí, en medio de una actuación, cuando Juan Rey anunció con emoción, y muy agradecido a su clientela, que lo traspasaba. «Toca cerrar una puerta y abrir otra», aclaraba

29 oct 2024 . Actualizado a las 09:42 h.

En octubre del 2014 Juan Rey tomó las riendas, con la complicidad de su hija y socia, del Rock Café, el bar de la República Arxentina, en el Ensanche compostelano, que rápidamente se hizo un nombre tanto por su decoración y su buena música como por iniciativas como las de recuperar las tazas, recaudar regalos en cada Navidad o convertirse, también por la querencia familiar por las motos, en parada obligada para muchos moteros de Santiago.

El pasado sábado, diez años después, el impulsor del Rock Café anunciaba, en medio de una actuación por ese aniversario, que se despedía. «Lo dejo… Muchos sabéis el tiempo que llevo con el tema del traspaso del local; pues bien, ya ha sido efectivo», aclaraba. «El Rock Café seguirá funcionando, este buque no puede ni debe parar, pero será bajo una nueva batuta», añadía en una explicación también compartida en las redes sociales del establecimiento.

«Toca cerrar una puerta y abrir otra. Este es el último aniversario como dueño de este templo del rock and roll. Cuando llegamos mi hija y yo aquí no era nada...», evocaba emocionado y con orgullo, mientras se sucedían los aplausos entre los asistentes. «Toca cambiar de ritmo. Esperan muchas otras cosas... Familia y poder descansar un poco. El Rock Café va a seguir funcionando», incidía, señalando que «no se va de golpe». «No sería justo. Estaré con mi horario de mañana hasta finales de año por lo que tenéis tiempo de venir y darme un achuchón», animaba, mientras enlazaba continuos agradecimientos a su clientela.

«Sinceramente os lo digo: la riqueza más gratificante que se puede llevar de aquí sois vosotros. En lo económico, se puede estar un día arriba, otro abajo, y ya está. Pero lo mejor de todo fue conoceros a vosotros; vais a estar siempre en mi pecho y en la base de este templo», recalcaba Juan Rey. «Quiero agradeceros a todos vuestra complicidad; como siempre dije, sin vosotros esto no sería posible. Han sido diez años donde la mayor riqueza adquirida fue la cantidad de gente tan maravillosa que hizo, y hace de este local una gran estrella», ahondaba. 

Los mensajes de ánimo ante su nueva etapa y de tristeza por la despedida no se hicieron esperar. «¡Hasta para despedirte eres grande! Sé que lo querías dejar en buenas manos para que tuviera continuidad con el mismo, bueno, parecido carácter y estilo, porque el vuestro es único... ¡Larga vida al nuevo Rock Café y suerte al nuevo boss porque "nuestro" Rock Café contigo siempre estará en el corazón! ¡Mañana voy a achucharte!», ya le anunciaba un seguidor en las redes.