No será la más famosa, pero la cesta de esta cooperativa de Ames sí sorprende por sus productos naturales y de proximidad

Andrés Vázquez Martínez
Andrés Vázquez SANTIAGO / LA VOZ

VIVIR SANTIAGO

La cesta que CLUN ofrece a sus trabajadores, compuesta de productos naturales y de proximidad.
La cesta que CLUN ofrece a sus trabajadores, compuesta de productos naturales y de proximidad. Cedida

Una agrupación de empresas del rural gallego se unen para ofrecer a sus trabajadores los productos que la mejor calidad

25 dic 2022 . Actualizado a las 11:18 h.

A pesar de que sean muchas menos las empresas que a día de hoy sigan obsequiando con una cesta a sus empleados, la cooperativa CLUN (Cooperativa Rural Galega), matriz de marcas como Feiraco o Clesa y con sede en Ames, ha reconocido a sus 600 trabajadores con una cesta navideña repleta de productos gallegos de origen totalmente natural y de proximidad. La sostenibilidad, por tanto, está más que garantizada al tratarse de artículos que generan los propios cooperativistas en el rural de Galicia.

CLUN se une a otras nueve cooperativas, todas relacionadas con el mundo rural y, por tanto, preparadas para ofrecer el mejor de los productos gastronómicos de Galicia. Estas son la vitivinícola Viña Costeira; Milhulloa, dedicada al cultivo ecológico de plantas medicinales; Embruxo, que produce aceite de oliva; la apícola Erica Mel; Tres Fuciños, productores de porco celta; Amarelante, dedicada al cultivo ecológico y sostenible de castañas; Ribeiregas, centrada en la producción de alimentos ecológicos; y Terras da Mariña, especializados en el cultivo de habas.

La cesta contiene un poquito de cada una de estas cooperativas, garantes de la economía social que vertebra Galicia. Entre los productos, como no podía ser de otro modo al tratarse de CLUN, se encuentra la leche, pero también el jamón de porco celta curado durante 36 meses que aporta Tres Fuciños, la harina de castaña de Amarelante, las «fabas do marisco» (llamadas así por lo bien que maridan con él) que pone Terras da Mariña o el vino espumoso Lúa con el que participa Viña Costeira. Este último, además, forma parte del proyecto solidario Viña Costeira Rural Alzheimer, festoneado por Afaor, la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer.

Los gallegos somos sibaritas porque podemos

Las cestas de los particulares, las de aquellos que no tienen una de empresa o que esta les sabe a poco, están cargadas en Santiago de los artículos más exclusivos. «O cliente, cando vén por unha cesta, non se conforma con calquera cousa: quere o mellor», argumenta Carlos Rodríguez, gerente de A Cesta Tenda, en Santiago. En su establecimiento, cuyo nombre no deja lugar a dudas, se hacen las cestas con mejores productos de la capital gallega y en muchos casos del mundo, productos que se pueden igualar, pero no superar, «porque temos, por exemplo, as mellores variantes de queixo do planeta, recoñecidos como tal, e tamén moitos dos nomeados como mellores produtos de España».

Carlos Rodríguez, de A Cesta Tenda, con una imagen de Santiago Apóstol en imagen de archivo.
Carlos Rodríguez, de A Cesta Tenda, con una imagen de Santiago Apóstol en imagen de archivo. SANDRA ALONSO

En A Cesta Tenda poseen, cuenta su dueño, ejemplares de quesos como el Savel, de la quesería chantadina Airas Moniz, y que este año ha repetido por segunda vez como mejor queso azul de España. También a nivel estatal y mundial destacan los de Don Crisanto, que fabrica un San Simón da Costa galardonado como el mejor en el 2017 y que viene de llevarse una medalla de oro en el World Cheese Awards (el campeonato mundial de los quesos). Este mismo certamen homenajeó a Galmesán, queso de Arzúa, como el mejor curado de vaca del mundo. Y si estos quesos están en todos los locales de Galicia es precisamente porque se hacen aquí, porque nuestra industria gastronómica es puntera a nivel mundial en muchos aspectos.

Pero no solo de quesos va la cosa en A Cesta Tenda, pues allí también destacan los bombones Costiña o el turrón de queso azul Savel creado por la chef Lucía Freitas, «dúas das grandes estrelas deste ano, entre os máis vendidos seguro». A esta lista de originalidad y vanguardia se han de sumar los bombones de mermelada y pimiento de Herbón, elaborados por A Pementeira y Meidingalicia, o los vinagres gallegos de O Ribeiro, elaborados también con pimientos y que salieron vencedores por primera vez para un producto gallego en el certamen internacional sobre vinagres Vinavin, celebrado en Córdoba.

Una de las cestas de A Cesta Tenda, valorada en unos 120 euros.
Una de las cestas de A Cesta Tenda, valorada en unos 120 euros.

Lo que se busca en la mayoría de los casos es sorprender al que recibe la cesta, porque casi siempre se emplean como regalo. Así lo asegura Sergio Eceiza, uno de los socios que componen GulaGalega Gourmet, también en la capital. «Non acostuman a escatimar e sempre apostan polas mellores calidades de viño, vermú, queixo ou conservas, pois saben que é unha vez ao ano», señala. Cuenta Eceiza que en muchas ocasiones las cestas se envían a familiares que están fuera de Galicia, «polo que o produto da terra é o que máis triunfa, para intentar calmar a morriña».