Las volandeiras «más asombrosas» y el pani puri que impresionaron al chef Gordon Ramsay en Santiago

Olalla Sánchez Pintos
Olalla Sánchez SANTIAGO / LA VOZ

VIVIR SANTIAGO

Gordon Ramsay con el equipo del restaurante Abastos 2.0. Luis Rojas, el jefe de cocina, está a su izquierda
Gordon Ramsay con el equipo del restaurante Abastos 2.0. Luis Rojas, el jefe de cocina, está a su izquierda Cedida

El cocinero británico, que ha obtenido a lo largo de su vida profesional 17 estrellas Michelin, quiso dejar constancia en sus redes de su paso por los restaurantes compostelanos Abastos 2.0 y A Maceta. El lunes se trasladó a la Pulpería Rial de Padrón para tomar pimientos de Herbón

01 dic 2022 . Actualizado a las 00:00 h.

Fue el viernes por la noche, horas antes de que el mediático chef británico Gordon Ramsay, el cocinero de las versiones norteamericanas de Pesadilla en la cocina y Masterchef, se acercase a la Praza de Abastos de Santiago para el rodaje de su programa Road Trip -de la plataforma HBO-, cuando cenó en sus inmediaciones, en el restaurante Abastos 2.0. «Fue una sorpresa. No lo sabíamos. Estaba hecha una reserva, pero nunca nos imaginamos que sería él», reconoce Luis Rojas, el jefe de cocina del prestigioso establecimiento compostelano.

«Justo coincidía que estaban echando en la tele el Inglaterra - Estados Unidos. Tras saludar, pidieron unas cañas, mientras seguían el partido», destaca, aludiendo tanto al popular cocinero -que llegó a tener 17 estrellas Michelin, de las que conserva actualmente siete en algunos de sus establecimientos- como a sus compañeros de rodaje, Gino D'Acampo y Fred Sirieix.

«No se preparó nada especial. Tomó el menú normal, algo que creo que ellos también agradecen y valoran», reflexiona Rojas recordando que, entre otros platos, disfrutaron de navajas, sashimi de lubina o caballa.

«Cuando lo vi entrar, no niego la presión, pero, cuando ves que actúa con tanta naturalidad, te relajas. Luego se acercó a la cocina a felicitarnos a todos por la comida. Ahí notas que realmente le gustó», insiste con humildad.

Horas después de la cena, y mientras su presencia en Santiago no pasaba desapercibida, el chef publicó dos stories en su Instagram en los que reconocía el «trabajo bien hecho» del restaurante, alabando tanto la frescura del marisco («some of the freshest seafood in Spain is in Santiago… well done Abastos 2.0») como la impresión que le dejaron las volandeiras de lugar («the most amazing scallops»). 

«Es un orgullo y un halago que alguien que tienes como referente hable así de nuestra cocina, que diga que nuestras volandeiras son asombrosas», desliza siempre en plural Rojas. «Yo no me había enterado de las publicaciones. No me había dado tiempo, pero mis compañeros me advirtieron», añade divertido.

Grabación en la Praza de Abastos

Horas después de la cena en el Abastos 2.0, Gordon Ramsay, grababa durante poco más de una hora en la Praza de Abastos de Santiago, revolucionando sus naves. Quienes le conocían intentaban fotografiarle en medio de una nube de técnicos. Y los que no habían oído hablar de él se preguntaban quién sería la estrella de cara amable y sonrisa simpática. 

El mercado compostelano, donde adquirió un chuletón de vaca gallega, percebes y pulpo, será uno de las protagonistas de un episodio de su programa Road Trip, junto a otras localidades gallegas. 

«Impresionante comida» en A Maceta

El sábado por la noche Gordon Ramsay hizo parada en A Maceta, otros de los locales de mayor renombre en los últimos años en Santiago. Enclavado en la rúa de San Pedro, el restaurante fue noticia en los últimos días al debutar en la lista Bib Gourmand -que pone énfasis en aquellos establecimientos que apuestan por una alta calidad a precios muy ajustados- de la Guía Michelin, subiendo a nueve el número de establecimientos compostelanos ensalzados en esa categoría.

Gordon Ramsay, con el equipo de A Maceta. A su izquierda está Jorge Gago, el jefe de cocina
Gordon Ramsay, con el equipo de A Maceta. A su izquierda está Jorge Gago, el jefe de cocina

«Fue un cliente más; no se hizo notar y, al acabar, quiso felicitarnos y darnos la mano uno por uno», coincide Jorge Gago, el jefe de cocina. «Parecía que él estaba agradecido a nosotros, cuando realmente lo estamos nosotros», añade, explicando cómo quisieron hacerle un repaso por su carta actual, unas propuestas que el chef también quiso alabar en sus redes con un «beautiful food» (comida bonita), sobre un snack de tartar de salmón, y un «stunning meal» (impresionante comida), sobre un pani puri -un snack, a modo de aperitivo- de sardina. «Como rota tanto nuestro menú, si llega a venir hace un mes, le ofreceríamos otros platos», desliza Gago risueño.

«Da gusto ver su cercanía, su carácter bromista, también con la gente, que le pedía fotos. Para nosotros fue un lujo que viniera», admite el chef. 

Parada en la Pulpería Rial de Padrón

Tras descansar el domingo, Gordon Ramsay volvió al lunes al trabajo con una intensa jornada, que le llevó primero a hacer un alto en la conocida Pulpería Rial de Padrón, que ya roza sus cuarenta años de historia, donde tomó pimientos de Herbón y, como confirma Begoña Rial, hija de los fundadores del establecimiento -José Manuel Rial y Lydia Angueira, fue «cercano y divertido». El mediático chef, que posó junto a Begoña y su hermano José Manuel, les dedicó un libro suyo.

A continación, Gordon Ramsay ya se dirigió a la Costa da Morte, en concreto a Malpica, para conocer de primera mano cómo se coge el rey del marisco gallego. El chef estuvo en el entorno de Seaia, recopilando más material para su programa Road Trip.