Un viejo vagón servirá en Vedra como centro de emprendedores

emma araújo SANTIAGO / LA VOZ

VEDRA

CARLOS CORTÉS

El proyecto de restauración está financiado con fondos Feder

31 ago 2018 . Actualizado a las 05:10 h.

En la estación ferroviaria de Santa Cruz de Ribadulla de Vedra ya no para ningún tren de viajeros, pero esto no implica que sea un sitio muerto. Así lo ha planteado el Concello al convertir la antigua estación en espacio de uso público y educativo aprovechando el edificio de la antigua estación, rehabilitado hace seis años, y la nave anexa.

El último vagón llegó, literalmente, en octubre del año pasado, cuando parte de un tren, popularmente conocido como camello, entró para transformarse en un centro de coworking. No lo hizo por las vías, sino por carretera tras un complicado traslado, que necesitó el uso de una grúa de grandes dimensiones y varios intentos, ya que la destartalada estructura ferroviaria permaneció aparcada y abandonada durante años en la estación de Monforte, en donde fue objeto de múltiples actos vandálicos que destrozaron su interior, convirtiéndose también en un improvisado lienzo para grafitis.

Con la vieja máquina con jorobas llegaron piezas de otra parte del mismo tren, que sufrió un incendio, y que se van a reutilizar en el proceso de rehabilitación de la estructura.

El nuevo centro funcionará, según consta en la memoria del proyecto, del arquitecto Fermín G. Blanco, «como un espacio de trabajo destinado a vivero de empresas, nuevas firmas locales y startup». El vagón contará con espacios destinados a sala de reuniones, una zona de trabajo y otra para el uso de nuevas tecnologías. Dispondrá de acceso a Internet mediante una red wifi y preinstalaciones de telefonía asociadas, entre otros equipamientos.

El coste del proyecto roza los cien mil euros, necesarios para afrontar el complejo transporte desde Monforte y las distintas fases de la restauración. La primera, en la parte exterior, ya está lista. Ahora queda la interior.

Su ejecución, anunciada ayer por el Concello, «forma parte de un plan más amplio, destinado a la recuperación de toda la estación de ferrocarril y de los espacios que la componen», según consta en la citada memoria.

El futuro vagón coworking será autosuficiente en lo que a la energía se refiere, con un sistema de energía solar fotovoltaica autónoma. La financiación del proyecto, cuyo diseño y contratación fue aprobado hace prácticamente un año, la comparte el propio Concello de Vedra y fondos europeos del plan Feder, ya que el municipio forma parte de la entidad supramunicipal Terras de Compostela.