Diputación y concellos de la comarca crean el Parque Compostela Rupestre

Emma Araújo SANTIAGO / LA VOZ

TEO

Álvaro Ballesteros

El plan arranca con la firma de convenios entre los municipios y la entidad provincial

04 abr 2018 . Actualizado a las 05:10 h.

Los ayuntamientos de Santiago, Ames, Teo, Brión, Vedra, Boqueixón y Val do Dubra, los mismos que integran la mancomunidad compostelana, han decidido crear bajo el paraguas administrativo y también económico de la Diputación provincial una nueva entidad, reconocida como una «comunidade intermunicipal de servizos consorciados».

El objetivo de esta agrupación, que no tiene entidad jurídica propia, ni presupuesto, ni sus integrantes tendrán retribuciones por su pertenencia a este organismo, es poner en marcha el proyecto Parque Compostela Rupestre El origen de ese plan está en el interés inicial mostrado por los municipios de Teo, Ames y Santiago para preservar y poner en valor un patrimonio arqueológico afectado por los incendios forestales, las dificultades para protegerlo y por el desconocimiento sobre la importancia de estos restos, pese a su catalogación como Bens de Interese Cultural.

Tras esta predisposición, el resto de municipios de la comarca compostelana se han sumado al proyecto, que esta misma semana dará sus primeros pasos administrativos. El primero de ellos verá la luz esta misma noche con la previsible aprobación de un convenio marco entre el Ayuntamiento de Teo y la Diputación provincial para adherirse al Parque Compostela Rupestre. Por una cuestión de calendario, mañana le tocará tomar el mismo acuerdo al Concello de Ames y así sucesivamente. El convenio tiene una vigencia de cuatro años, prorrogables, como máximo, por un período idéntico.

La gestión conjunta de este proyecto para la puesta en valor de las manifestaciones de arte rupestre conocidas en la comarca, y para las que puedan aparecer, comenzará con la redacción de una memoria y un plan de actuación que deberá contar con una estimación presupuestaria, un plan director y un estudio económico que delimite las intervenciones en cada uno de los municipios. Y con el compromiso de cada concello de que está en disposición de garantizar la financiación de los costes que le sean asignados.

En caso de que las Administraciones locales opten por delegar sus competencias en la Diputación, deberá adoptarse un acuerdo de todos ellos a tal efecto.

La nueva comunidad intermunicipal contará con un consejo de dirección que tendrá entre sus cometidos realizar un seguimiento del convenio y de sus acuerdos. Estará formado por dos representantes de cada municipio y dos miembros de la Diputación.

La presidencia de la entidad será rotatoria entre los concellos, tomando como referencia inicial el de mayor población, lo que implica que se estrenará con la de Compostela, seguida de Ames, Teo y Brión, cumpliendo así el período inicial de vigencia de cuatro años.

El convenio entrará en vigor quince días después de que terminen las adhesiones de los ayuntamientos y de la firma del documento con la Diputación.