El corte en Xeneral Pardiñas mide la viabilidad de un Ensanche peatonal

SANTIAGO CIUDAD

Las obras dejan sin tráfico dos meses uno de los ejes de la zona nueva de Santiago
06 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.El corte por obras en el cruce entre las calles Xeneral Pardiñas y República do Salvador no supuso grandes problemas de tráfico en el primer día de los dos meses que este eje de la zona nueva de Santiago va a estar cerrado a la circulación. La intervención mejorará la accesibilidad en un punto que ya es de preferencia peatonal, a imagen de lo que ya existe en el tramo de Montero Ríos, igualando la calzada con las aceras para que quede perfectamente claro que los coches deben siempre ceder el paso y transitar muy despacio. Pero a nadie se le escapa que también va a servir como examen de la viabilidad que tendría la completa peatonalización de esta zona en el futuro, un proyecto que no figura blanco sobre negro en los planes del gobierno local, pero que está siempre sobre la mesa y más aún teniendo en cuenta que si el actual ejecutivo presidido por el Bloque tiene un referente urbanístico este es la Pontevedra del nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores, cuyas políticas urbanísticas han ido en este sentido y han recibido el aplauso generalizado de los ciudadanos y numerosos reconocimientos internacionales.
Puede decirse que el primer día se superó el examen, sin atascos ni grandes molestias. La zona ha quedado perfectamente señalizada con carteles que indican que está prohibido el acceso por República do Salvador desde Doctor Teixeiro y por Xeneral Pardiñas desde República Arxentina salvo para residentes que vayan a sus garajes. En estas primeras 24 horas de cierre ha quedado también patente que la obra es del todo necesaria. Y es que mientras los operarios preparaban el cruce para cortarlo al tráfico había vehículos —sobre todo furgonetas de reparto— que pasaban por este punto a velocidad excesiva o sin respetar la preferencia de los peatones. Hubo hasta alguno que tocó el claxon para reprender a un transeúnte que cruzaba sin percatarse el conductor de que era él quien debía ceder el paso.
Los trabajos tienen una duración prevista de un mes, pero hará falta otro para que fragüe adecuadamente el hormigón que se va a colocar en todo el cruce. Solo entonces volverán a pasar los coches y buses por la plaza.
La Policía Local supervisó el cierre del cruce
Los operarios de las empresas que van a ejecutar las obras de mejora de la accesibilidad en el cruce de Xeneral Pardiñas con República do Salvador estaban ya antes de las 9.30 horas en la zona. En cuanto que llegó el camión que les envió las vallas con las que tenían que cerrar toda la plaza las fueron colocando y a las 10.30 horas ya estaba todo el perímetro instalado en la zona de las aceras. Faltaba aún el de las vías, por lo que la circulación era aún posible y resultaba evidente que muchos conductores se estaban saltando las señales que indicaban que estaba prohibido circular. La Policía Local supervisó el operativo desde el primer momento, pero con buen criterio optó por hacer la vista gorda en esos primeros momentos y no cortar el tráfico hasta que el resto de la intervención estuviese completada.
El flujo de vehículos era en esos momentos intenso, pero se desarrolló sin ningún problema. Solo hubo algo de confusión en el momento en el que llegó una grúa con la pala excavadora que va a acometer las obras. Y es que en ese momento sí quedó cortado completamente al tráfico ese tramo de Xeneral Pardiñas.
A mediodía, los operarios colocaron ya las vallas cerrando toda la circunferencia en la que se va a trabajar, cortando así al tráfico este transitado cruce del Ensanche. Ya sin la posibilidad real de saltarse las señales que prohíben el paso a excepción de los residentes que van a sus garajes, la sensación es que el operativo se había desarrollado con éxito.
Al quedar cortada por completo la circulación, las líneas del bus urbano 5, 13, 15, C11 y P6, que pasan por el cruce, han tenido que desviar su itinerario y también han quedado suprimidas las paradas 433 de República do Salvador y las 673 y 674 de Xeneral Pardiñas. Pese a estar anunciado, no faltó algún despistado.