Plataforma polo Emprego acusa al Concello de Santiago de actuar solo de imagen con la economía social

La Voz

SANTIAGO CIUDAD

XOAN A. SOLER

Cuestiona el procedimiento seguido para el nuevo contrato de recogida del aceite, cuyo concurso no incluyó «cláusula social algunha» y que excluye a Compostela Inserta

05 feb 2025 . Actualizado a las 19:52 h.

Plataforma polo Emprego ha manifestado su malestar con el proceder municipal para la contratación del servicio de recogida de aceite vegetal usado, un servicio que desde este año es obligado prestar con contenedores en la vía pública y que el Ayuntamiento sacó a licitación a finales del 2024. Aunque con pocos puntos de recogida, ahora mismo ya funcionaba un servicio para la retirada del aceite depositado esencialmente en centros socioculturales, servicio del que se encargaba, todavía lo hace, Compostela Inserta, una empresa de inserción laboral que aspiraba a hacerse con el nuevo contrato en alianza con la cooperativa Mulleres Colleiteiras de A Coruña (trabaja en la inserción en el mercado laboral de mujeres de etnia gitana), lo que permitiría a Compostela Inserta cubrir las autorizaciones precisas para desarrollar la actividad con el nuevo servicio.

Pero, ante la proximidad de la entrada en vigor de la normativa que obliga a los ayuntamientos a organizar esa recogida, ni Plataforma polo Emprego ni Compostela Inserta fueron convocadas en ningún momento por el Ayuntamiento para estudiar la forma de realizar un contrato que permitiese seguir con la actividad de Compostela Inserta, denuncian. Solo fueron convocados, dicen, cuando, tras la licitación de un concurso cuyos requisitos impedían la participación de Compostela Inserta, ambos manifestaron su «fonda decepción» al gobierno de Goretti Sanmartín.

En aquella reunión se les expuso la posibilidad de presentar alegaciones para «tratar de canalizar e reverter a situación», según el comunicado hecho público hoy por Plataforma polo Emprego. Esas alegaciones fueron inadmitidas por la Xunta de Goberno de este lunes por extemporáneas. Es decir, por presentarse fuera de plazo, aunque Plataforma polo Emprego apunta que se presentaron en el «que se estableceu nesa xuntanza», aunque, si algo ha sorprendido a esa plataforma, es que el Ayuntamiento haya sacado un concurso que «non incluía cláusula social algunha», en contra «da propia normativa municipal».

En ese contexto, tanto la plataforma como Compostela Inserta propusieron a los responsables municipales la posibilidad de continuar con el modelo de convenio que venía funcionando hasta ahora, con el del contrato reservado, el de contrato abierto con cláusulas sociales o incluso la fórmula jurídica del concierto social. Pero el Ayuntamiento decidió seguir con el procedimiento inicial, en que el que se han presentado dos empresas de fuera de Galicia, lo que «supón a definitiva exclusión do proceso de Compostela Inserta».

Plataforma polo Emprego, que junto con Compostela Inserta demandó en los últimos años la extensión de la recogida en la vía pública como un modelo más efectivo y práctico de prestación del servicio, al tiempo que permitiría aumentar el número de trabajadores en inserción, lamenta que, «unha vez máis, na práctica, a teórica aposta municipal pola contratación reservada, pola economía social e, polo tanto, pola inclusión dos colectivos en situación de probreza e exclusión social, é só unha mera cuestión de imaxe».

Porque, dice, cuando es preciso apostar por las personas en situación de probreza y exclusión social y por las organizaciones que trabajan en ese ámbito, «o Concello de Santiago opta por outras empresas para desenvolver as actividades que xeran traballo e riqueza». Para Plataforma polo Emprego y Compostela Inserta quedan, en todo caso, señalan, «as migallas que estas grandes compañías (sempre que acepten porque o contrato non lles obriga) poidan ofrecer: a pequena cota da inclusión, para quedar todas máis satisfeitas».

Desde Mulleres Colleiteiras, que indican que en aquella reunión a la que alude Plataforma polo Emprego se les comunicó un plazo para alegar más amplio del que finalmente resultó, lamentan que en un gobierno que mantiene el discurso de una Compostela feminista y «capital da economía social» se vaya a entregar el servicio «o mellor postor». Y dicen que intentarán recurrir la decisión municipal.