La Navidad une al comercio de la rúa das Ameas, que está más hermosa que nunca

No es la primera vez que los comerciantes de una calle de Santiago sufragan con sus propios fondos económicos y se ponen manos a la obra para destacar por su decoración navideña. Ya ocurrió hace años en varias rúas del Ensanche, y esta vez también en la rúa das Ameas, del casco histórico. La idea, como suele ocurrir, partió de una de las comerciantes de la calle, y a la iniciativa fueron sumándose otros colegas. Solo uno se resistió a la idea. Mayca Iglesias, de Myka Decoración, dice que su papel fue el de decir «adelante», porque las auténticas armadanzas del proyecto son Marta Rey, gerente de la Praza «que me planteó el tema y no puede decirle que no»; y Raquel Ces, otra de las caras visibles del comercio de decoración, «que se encargó de todo. A ella le encanta la Navidad. Lo disfruta. Yo estoy a tope con varios proyectos y no tenía tiempo. Todo el mérito es suyo. Su creatividad es increíble». Raquel fue la encargada del diseño de la calle y también de implicar, en el tema económico, a sus vecinos comerciantes. En el montaje no estuvo sola. Iris Cabaleiro y Sara Oliveira participaron en el montaje de los elementos. «Cada comerciante aportó un dinero, pero nosotros regalamos nuestro tiempo y Raquel dedicó muchas horas. Creo que valió la pena». Eso sí, Mayca quiere dejar claro que el árbol de San Fiz no forma parte del diseño de Raquel para la calle. «Eso es del Concello. Déjalo claro». Aclarado queda. La decoración de la rúa das Ameas «tenía un fin. Es una calle con muchas posibilidades. Las casillas de la Praza de Abastos son más bonitas de lo que pueda parecer a simple vista, y con la decoración destacan aún más. El objetivo es el de atraer a más gente a pasear por la calle. A quedarse y descubrir una zona». Con la decoración navideña, la rúa das Ameas «es un oasis en medio del casco histórico. Merece la pena venir de día, y cuando empieza a oscurecer es aún más bonita». Mayca lleva 11 años en el local de As Ameas y «nunca se unieron para la decoración. Es algo bonito». Antes de abrir su tienda de decoración, que estos días rebosa Navidad, y el estudio de la primera planta, Mayca trabajó 20 años en otro comercio histórico, Cosas de Casa, de la que era una de las propietarias. La decoración «siempre me gustó y recuerdo que cuando dije que abría en As Ameas me dijeron que estaba loca, pero fue una buena decisión. Es un lugar perfecto».

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