«Habemus Sionlla amores»: nueva concentración ilegal de coches en Santiago convocada por redes sociales y mensajes masivos a móviles

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Restos de goma en el vial paralelo a la calle Castilla-La Mancha en la que se organizan las concentraciones ilegales de coches
Restos de goma en el vial paralelo a la calle Castilla-La Mancha en la que se organizan las concentraciones ilegales de coches XOAN A. SOLER

El dispositivo especial de vigilancia de la Policía Local para Halloween se salda con 34 participantes multados en el polígono

01 nov 2024 . Actualizado a las 17:12 h.

«Habemus Sionlla amores». Así, con ese eslogan y un cartel diseñado especialmente para la ocasión se convocó a través de redes sociales y envíos masivos de mensajes a móviles la última concentración ilegal de coches en el polígono empresarial de A Sionlla, en Santiago. En la imagen se mostraba la fecha y la hora de la reunión, el 31 de octubre a las 23.30 horas, y el lugar, un vial sin tráfico porque es solo para aparcamiento que está situado en paralelo a la calle Castilla-La Mancha. Un nivel de descaro que muestra a las claras que los grupos que se dedican a estas peligrosas actividades tienen a la capital gallega entre sus puntos favoritos, lo que ha motivado que desde el Concello se ponga en marcha un plan especial de vigilancia con vehículos camuflados de la Policía Local que está dando sus frutos. Solo en la noche del jueves al viernes se impusieron 34 multas a los participantes, que se suman a las 19 que ya habían sido tramitadas en las dos últimas citas celebradas, una de ellas en San Lázaro en la que hubo incluso una carrera ilegal.

De las 34 sanciones que se han llevado como recuerdo los conductores que acudieron a la última concentración ilegal de coches de A Sionlla, treinta de ellas son por exceso de velocidad, dos por haber realizado reformas de importancia en los vehículos y otras dos por no tener pasada la ITV.

 

Cartel de la última convocatoria ilegal de coches en el polígono de A Sionlla
Cartel de la última convocatoria ilegal de coches en el polígono de A Sionlla

Son todas multas cuantiosas, ya que la velocidad máxima permitida en el polígono es de 50 kilómetros por hora, por lo que la gran mayoría de ellas supondrán pérdidas de puntos y una importante cantidad económica. En cuanto a las impuestas por realizar reformas importantes no permitidas a los vehículos, son de 500 euros, mientras que las recibidas por no haber pasado la ITV ascienden a 200 euros.

Las 19 con las que se saldaron las dos concentraciones anteriores, doce en A Sionlla y siete en el estadio de San Lázaro, fueron en su gran mayoría por conducción temeraria, que es uno de los comportamientos más castigados por la ley de seguridad vial. Los sancionados por este motivo tendrán que hacer frente a la retirada de seis puntos del carné y al pago de 500 euros.

La noche fue complicada para la Policía Local compostelana. Además de la concentración ilegal de coches en A Sionlla tuvo que mantener un amplio dispositivo en toda la ciudad para vigilar las celebraciones de Halloween. Casi 200 conductores fueron sometidos a pruebas de alcoholemia tanto en el polígono empresarial como en otros puntos de la ciudad. De ellos, seis no pasaron el test y fueron sancionados en vía administrativa. Dos más dieron positivo en drogas y a otros dos más se les multó por no llevar puesto el cinturón de seguridad.

Además, los agentes municipales también tuvieron que sancionar a una persona por falta de respeto y consideración a la policía y hubo que acudir a un total de catorce pisos en los que se estaban llevando a cabo fiestas y se superaba el nivel máximo de ruido permitido.

Además de la Policía Local, tanto la Nacional como la Guardia Civil también contaron con dispositivos especiales de vigilancia, tanto en el casco urbano como en zonas del rural, donde Tráfico llevó también a cabo pruebas de alcohol y drogas.

Mano dura para mandar el mensaje a los organizadores de que no vuelvan a Santiago

Con los últimos dispositivos de vigilancia, en los que se emplean vehículos camuflados, la Policía Local quiere enviar un mensaje muy claro a los organizadores de las quedadas ilegales de coches y advertirles que, si regresan a la ciudad, serán severamente castigados con multas por todos aquellos conceptos posibles que sea posible. El objetivo es evitar que tengan la sensación de que pueden llevar a cabo sus peligrosas e ilícitas convocatorias con impunidad. «Si vuelven, ampliaremos el plan, con más recursos para que entiendan que todo aquel que venga será multado», explica un agente municipal.

Y es que la concentración de coches no es en sí ilegal, pero sí muchas de las cosas que suceden en esos eventos, en los que se consume alcohol, se hacen derrapes y trompos y se circula a más velocidad de la permitida. En ocasiones, incluso se hacen carreras. Todo ello es susceptible de sanción por poder considerarse conducción temeraria, que la ley recoge como una infracción muy grave porque se actúa al volante con manifiesto riesgo para las personas.

Y es que en esa recta en la que se concentran los vehículos en A Sionlla, los espectadores se colocan en el asfalto a ambos lados de la calle sin que exista ninguna medida de protección. Todo para ver como los conductores van pasando uno tras otro, pegando acelerones para después frenar en seco haciendo derrapes y giros bruscos.

Cuando la concentración se efectúa en el estadio de fútbol Verónica Boquete de San Lázaro es frecuente que, además de los trompos y derrapes, se hagan también carreras entre al menos dos vehículos. Eso fue lo que ocurrió en la noche del 19 al 20 de octubre, cuando una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico que venía desde Aríns persiguiendo a un conductor que se había saltado un control de alcoholemia se dio de bruces con cerca de dos centenares de coches que habían acudido a la cita justo en el momento en el que dos de ellos competían en una prueba de velocidad.

En aquella ocasión se puso de manifiesto que, como se temían las fuerzas y cuerpos de seguridad, a las concentraciones ilegales de coches que se celebran en Santiago llegan participantes desde toda Galicia. Y es que Tráfico multó a conductores censados en A Coruña o Lugo, por ejemplo.

Ahora que se conoce que las convocatorias se llevan a cabo a través de redes sociales y mensajes masivos a teléfonos móviles queda patente que tras esta peligrosa actividad hay detrás un grupo perfectamente organizado y que cuenta con logística suficiente como para congregar en la capital gallega a varios centenares de personas.