Marta: «El yoga es apto para todas las condiciones físicas. Hay muchos mitos»
SANTIAGO CIUDAD
Es psicóloga transpersonal y especialista en la terapia Gestalt, con la que se trabaja las emociones para desbloquear el estrés
04 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La sociedad cada vez más acelerada y despersonalizada está repercutiendo negativamente en los individuos, que «recurren cada vez más a los fármacos para superar situaciones que podrían solventarse con terapias de relajación y meditación», apunta Marta del Río Casanova, psicóloga transpersonal. Esta terapeuta lleva 15 años afincada en Santiago, después de recorrer diversas ciudades gallegas y españolas. Inició sus estudios de Psicología en la USC y completó su formación en la Universidad de Barcelona. En el 2007 fundó el PAS Galicia, que es una plataforma para la divulgación del rasgo de la alta sensibilidad en la comunidad. «Descubrí, al leer el libro de Elaine Aarom, que mi forma de ser no era rara, sino que había un 20 % de la población que tenía la misma forma de procesar y percibir los estímulos», revela. Mediante la plataforma, puso en marcha una serie de talleres y grupos de encuentro para «hablar de nuestras sensaciones. Somos personas que evitan el conflicto, que tienen dificultades para afrontar situaciones de confrontación. Necesitamos tiempo en soledad, no siempre comprendido, y buscamos explicaciones para todo». Tras unos años en la rúa da Algalia de Arriba, trasladó su despacho a Caldeirería, para volver ahora a un pequeño local, «tranquilo y silencioso», nuevamente en la Algalia de Arriba. «El local es perfecto para la práctica del yoga», una técnica que Marta considera ideal «y apta para todas las personas, independientemente de su condición física y de su edad». La psicóloga eligió la rama transpersonal, con la que trabaja fundamentalmente las emociones para «desbloquear la tensión y el estrés». El objetivo, dice, «es buscar el potencial de cada uno, porque es habitual centrarnos solo en lo negativo. Con frecuencia, sobre todo las mujeres, dejan sus necesidades en el último lugar de las prioridades». Marta cree que «frecuentemente, vivimos pensado en el pasado y el futuro. Nos lamentamos de lo que no hicimos y planificamos el futuro, pero nos olvidamos del presente».
El yoga «equilibra» y, en su opinión, a su alrededor «hay muchos mitos, como el de pensar que hay que adoptar posturas imposibles. Lo importante es la meditación». Se trata, según explica, de «lograr que la cabeza, el pensamiento, esté unido al cuerpo en movimiento. Unos lo consiguen antes y otros después, pero es una técnica de relajación, de fusión con uno mismo y de meditación». El objetivo de Marta en sus clases es lograr que las personas «se enfoquen en lo positivo y destierren lo negativo». Con algunas clases ya empezadas, Marta confía en recibir a nuevos alumnos, «que prueben las ventajas de una meditación que será perfecta para gestionar las emociones».