«O día 30 xubílome pase o que pase. Síntoo polos clientes, pero a vida hai que vivila»

SANTIAGO CIUDAD

El carnicero Esteban Martínez Miguel cierra una etapa vital y profesional de más de 50 años en la Praza de Abastos
07 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Tras toda una vida de trabajo, Esteban Martínez Miguel colgará la bata y el delantal de carnicero el próximo día 30. «Non miro atrás, pero xubílome pase o que pase. So o sinto polos clientes, que levan comigo dende que cheguei a Praza de Abastos en 1972, sendo un rapaz, e que viñeron comigo cando abrín a miña carnicería», agradece. Esteban reconoce que en este último mes de su vida laboral vive en una montaña de emociones: «Xa traballei de máis, e quero empezar a vivir. A vida hai que vivila. Pero logo veñen as clientas e dinme que onde van ir, como van a escoller carniceiro despois de tantos anos. Síntoo por elas, era mellor que aparecera alguén que queira o traspaso da carnicería, pero voume igual». Su primer contacto con el sector cárnico fue en 1972. Solo tenía 15 años, empezó a trabajar con otro carnicero y aprendió el oficio. Esteban no fue a la escuela: «Dinme conta de que non sabía nada. Pagueime pasantías na Salle para aprender a ler, escribir e facer as contas». Su esfuerzo se vio recompensado solo cinco años después, cuando se hizo con la casilla 56 de la nave 1. «Un millón de pesetas do ano 1977 me custaron a casilla e as obras. Un irmán animoume e tire para adiante», explica. El jefe de su hermana, dice, «falou co dono, o do bar As tazas, e fun de noite a pechar o trato». Desde entonces, Esteban está al frente de su negocio «de luns a sábado. Todos os días. Perdinme a vida dos fillos, e agora vou a estar con meu neto Salva, que ten tres anos». A su mujer, Josefina Viqueira, la conoció en la boda de su hermana. Trabajaba en la carnicería del que sería después su suegro, y que estaba en la casilla pegada a la suya. Se casaron en 1982 y fue entonces cuando unieron las dos casillas. En el 2000 se hicieron con otras dos y la carnicería creció. Su peor año laboral, confiesa, fue el 2000, cuando las vacas locas «fixeron moito dano». Esteban se reunió con Manuel Fraga y con el entonces ministro Miguel Arias Cañete: «Fraga veu comer carne á Praza. Aquelas vacas locas quitáronme anos de vida». Esteban fue presidente de Asuca en los 90. Es el primer socio de la cooperativa de la Praza. Por su vinculación a la asociación de carniceros se ganó el respeto del sector. «Teño que recoñecer que a miña palabra se ten en conta», señala. Recuerda que con 5 años dejó el hogar familiar «para ir de criado a unha casa. Ocupábame das vacas e dos bois. Os señores tiñan os fillos en Peleteiro e na Salle. Eu estaba polo caldo». Su vida fue «máis que dura. Moito chorei, e agora acabouse. O teño gañado». Esteban Martínez está seguro de que la Praza de Abastos «ten futuro, pero hai que traballar. Todos os días. Non podes abrir tres días e das dez a unha. Tes que estar. Ao cliente hai que atendelo e darlle solucións. Nós polas tardes facemos chicharróns e salchichas. A xente ven pola calidade, pero tamén pola conversación e pola atención», indica. Esteban Martínez se siente orgulloso «de darlle os estudos que eu non tiven aos meus fillos, Maica e Pedro». Asegura que en sus primeros días como jubilado «irei a un balneario. Gústame moito». Sin duda, lo tiene ganado.

Premio de foto en Ames
El consistorio de Ames acogió la entrega de los premios de fotografía EnfocaAmes. En la categoría Marco ganó María Cristina Valdés; el segundo premio fue para Lupe Ferro; y el tercero, para Leticia Nieto. Pablo Blanco, Elisa Gómez y Ainhoa Conde recibieron sendos accésits. En la categoría Paisaje, los tres primeros fueron Candela Conde, Ainhoa Conde y Alicia Sánchez. Recibieron accésits Lara Lozano, José Luis Gigirey y María Cristina Valdés. En la sección Artística, los tres primeros fueron José Luis Gigirey, Lucía Muñoz y Amparo Portabales. Y los accésits recayeron en Lucía Mallo, Elisa Gómez y Lara Lozano.

Fiesta de mayores en Brión
Una de las citas festivas más esperadas por los vecinos de más edad de Brión se celebró el pasado fin de semana en el polideportivo municipal. A la Festa dos Maiores acudieron cerca de 500 personas, que estuvieron acompañadas por el alcalde, Pablo Lago Sanmartín. El regidor se comprometió a seguir mejorando el evento con el que se rinde «homenaxe a todas as persoas maiores que viven en Brión». La fiesta contó con la música de un cuarteto de gaitas y con las canciones de la cantante local Ruth Cundíns.