Multitudinaria ilusión por los Reyes Magos en Santiago

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Las calles compostelanas y los concellos de la comarca se llenaron en el regreso de la cabalgata después de dos años de ausencia

06 ene 2023 . Actualizado a las 21:39 h.

«Por fin estamos aquí despois de dun longo tempo. Dous anos sen poder saudarvos», afirmó el rey Melchor nada más salir al balcón del pazo de Raxoi para dirigirse a una Praza do Obradoiro llena. Si Sus Majestades echaron de menos a los más pequeños en Santiago, el sentimiento era recíproco entre el público, como lo demostró la acogida multitudinaria que le tributaron a ellos y a toda su comitiva real a lo largo de la hora y media que recorrieron las calles compostelanas, que se encontraban llenas a su paso.

Era el regreso después de dos años, lo que provocó que la cantidad de pequeños que disfrutaban de la magia de la cabalgata por primera vez se incrementase. Este es el caso de los hermanos Ricardo y Arturo, de cinco años, y de Alicia, de tres años, ya que en las anteriores ediciones no se habían acercado hasta Bonaval para esas citas individuales y antes eran muy pequeños. Gaspar y Baltasar fueron sus preferidos y ya tenían claro lo que le iban a dejar en casa: «tarta de maíz y café». Para Elsa, de seis años, su asistencia a la cabalgata era como la primera vez, había estado en el 2019 pero en su memoria ya no estaba esa imagen de la visita real. «Me gustó mucho», afirmaba junto a su madre, que explicaba que el año pasado no lograron obtener una plaza para acudir a Bonaval.

Pero en el multitudinario recibimiento que Santiago tributó a Sus Majestades no solo las sonrisas se dibujaban en rostros infantiles. El público que siguió la comitiva real era de todas las edades e iba mucho más allá de las estampas familiares de pequeños con sus padres y abuelos. El buen tiempo reinante animó a salir a las calles también a adolescentes y a mayores, que no dudaron tampoco en dejarse seducir en las primeras filas por la magia de Melchor, Gaspar y Baltasar, que en Santiago llegaba acompañada también de la que propiciaban los cuentos clásicos. Así, por ejemplo, Baltasar viajaba en una carroza ambientada con el cuento de Aladín y Melchor, con el de Cenicienta. Junto a Sus Majestades, el cartero real, así como zancudos, la música de la Banda Santiago y representaciones de unicornios, cisnes, Os Bolechas y Xabarín, entre otros.

En la Praza do Obradoiro, los Reyes Magos no solo fueron recibidos por una multitud de público, sino también por la Banda de Música Municipal de Santiago, que interpretó unas piezas para animar la llegada. Después, el momento de apoteosis se vivió con la salida de Sus Majestades al balcón. Y no faltó la pregunta más repetida: «Fostes moi bos e boas durante este ano?». La formuló Gaspar y la respuesta fue un sonoro «sí». Ahí los pequeños recibieron las instrucciones para afrontar esta noche mágica: acostarse pronto y dejar tres pedazos de bizcocho, y también «un pouco de licor café», añadió Baltasar, que advirtió que «non vale quedar cos ollos abertos». Y ya puso en el calendario la cita del próximo año.

Después del discurso, en el Obradoiro ya se volvían a repetir las largas colas para acudir a entregar las últimas peticiones a Sus Majestades. Tantos que algunos ya desistieron en el intento de este encuentro más cercano, esta vez ya sin mamparas de separación tras dos años.

Si había mucha afluencia en la cabalgata, también eran numerosos los «pajes» que hacían las adquisiciones a última hora para luego repartir sobre los zapatos. Eran muchos los que portaban bolsas. El viernes tocará desempaquetar.

Los Reyes Magos tienen el inusual don de poder estar en muchos sitios a la vez, lo que explica que cada 5 de enero puedan recorrer todos los concellos desde los que han recibido una carta pidiendo regalos. Y como también son previsores, a muchos ayuntamientos llegaron a primera hora del día, lo que permitió a las familias con tiempo repetir experiencia con sus majestades de Oriente y acudir también al recorrido por Santiago o por las cabeceras de comarca del área metropolitana, en donde las recepciones suelen tener mucho más boato, pero menos cercanía con Melchor, Gaspar y Baltasar.

En el caso de Ames, con un recorrido por buena parte de su zona rural, sus majestades ya alegraron la mañana al menos a 1.500 menores, un número que creció como la espuma cuando llegaron a O Milladoiro y después a Bertamiráns. Antes de esto recorrieron Ameixenda, Cruxeiras, Aguapesada, Piñeiro, Covas, Tapia, Ortoño, Lens, Agrón Bugallido, Transmonte y Biduído.

El mismo esquema lo reprodujeron en Ordes y O Pino, con llegada al primer concello antes de las diez de la mañana para continuar por Santa Cruz de Montaos, Parada, Vilagudín, Lesta, Bailía, Mercurín, Leira, Ardemil, Adrán, Vilamaior, Barreiros, Beán, Pereira, Poulo y Buscás. Tras descansar, recorrieron el centro del casco urbano y ofrecieron una recepción acompañada de música frente a la Casa do Concello.

El itinerario por O Pino incluyó las parroquias de Pereira, Castrofeito, Budiño, O Pino, Gonzar, Medín, Pastor y Lardeiros. Tras un merecido descanso, la cabalgata retomó su actividad en San Breixo, San Mamede, San Miguel de Cerceda, Cebreiro para terminar a última hora de la tarde en el polideportivo municipal de Arca. El Concello aprovechó el acto para entregar los premios de concurso de postales.

El tren fue el medio elegido por los Reyes Magos para acercarse hasta Teo, donde fueron recibidos por la autoridad civil y seguidamente se subieron a un antiguo bus que los llevó por varios lugares del municipio hasta terminar en el pabellón de A Ramallosa, donde les esperaba una multitud.

A su llegada a Touro recibieron un especial homenaje, ya que, superadas las restricciones que trajo la pandemia, pudieron recordar el nacimiento del Niño Jesús con la recreación ofrecida por un belén viviente y las actuaciones de la Banda de Música Isabel II y el grupo de música tradicional A Pinguela de Bama, además de números de magia.

También en Padrón se acercaron a un belén viviente instalado en la iglesia parroquial de Santiago, en donde realizaron la tradicional ofrenda de oro, incienso y mirra. La cabalgata continuó hasta la Praza de Macías para ser recibida por autoridades municipales. Su visita terminó en el Campo do Souto, en donde estaba instalado un carrusel de acceso gratuito

A primera hora de la tarde sus majestades se trasladaron hasta a Arzúa, donde recorrieron las calles principales hasta llegar al Multiusos Terra do Queixo, donde se concentraron 500 niñas y niños que disfrutaron de talleres y una sesión de baile. En A Baña fueron recibidos con un espectáculo circense a las 17.30 horas y entregaron regalos, además de participar en la chocolatada que organizó el Concello. Y en Vedra contaron con la colaboración de la Asociación de Moteir@s Val do Ulla hasta la Nave da Estación, donde les esperaba una gran fiesta tras la recepción. La Casa da Cultura de Camporrapado fue el lugar elegido en Boqueixón para disfrutar de la fiesta de los Reyes Magos con un espectáculo cultural de acceso gratuito previa inscripción.