Dos modernos edificios sustituirán al actual cuartel de la Guardia Civil de Santiago
SANTIAGO CIUDAD
La obra comenzará en abril y se hará por fases para asegurar la continuidad del servicio y el alojamiento de las familias que residen en sus instalaciones
30 nov 2022 . Actualizado a las 05:00 h.La Guardia Civil tendrá nuevas dependencias administrativas y nuevas viviendas en Santiago hacia finales del 2025. Será en la misma zona que ocupa ahora mismo en As Cancelas, después de una inversión de 14 millones de euros y 30 meses de obra, según el proyecto que la directora general del cuerpo, María Gámez, presentó ayer junto con el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones; el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo; y la presidenta de la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios y de la Seguridad del Estado (Siepse), Mercedes Gallizo.
El proyecto está ahora mismo en proceso de licitación y se prevé su adjudicación en febrero del 2023, con lo que las obras comenzarían en abril. El plazo de ejecución se alargará hasta los dos años y medio debido a la necesidad de mantener la operatividad de todos los servicios que se prestan en las actuales dependencias y de asegurar vivienda alternativa en el mismo recinto a las 37 familias residentes en el acuartelamiento, lo que obligará a realizarlo por fases.
De los diez edificios actuales, solo sobrevivirá uno de viviendas, que se rehabilitará en la primera fase, para procurar ese alojamiento cuando se afronten las demoliciones. Las actuales instalaciones, de los años setenta y visiblemente aquejadas por el tiempo y la falta de mantenimiento, darán paso a dos construcciones modernas, compactas y con una clara apuesta por la sostenibilidad y la eficiencia energética, con cero emisiones de CO2, según Gallizo. Uno de ellos, de 2.310 metros cuadrados construidos, será para las dependencias administrativas y el otro, de 4.915 metros cuadrados, albergará 38 viviendas de dos y tres habitaciones y una residencia con servicios comunes y seis habitaciones para personal que viva solo y no precisen expresamente una vivienda.
La climatización de las dependencias administrativas será por geotermia, mientras que en las viviendas se hará por aerotermia y suelo radiante. «No se colocará ningún tipo de caldera, lo que supone que no se utilizará ningún combustible fósil y, por tanto, se trata de un edificio de cero emisiones de CO2 a la atmósfera», según el director de Siepse. También se instalarán paneles solares fotovoltaicos (38) para autoconsumo, así como un control centralizado del consumo, y todas las luminarias serán led. El aparcamiento con el que se dotará el recinto (67 plazas) incorporará además 23 puntos de recarga para vehículos eléctricos, aunque se dejarán todas las plazas con la preinstalación eléctrica para ampliar los puntos de recarga en el futuro.
Según la directora general de la Guardia Civil, este es un proyecto «muy necesario y muy esperado» y no solo mejorará las condiciones para los guardias civiles que trabajan en este acuartelamiento, sino para la prestación de sus servicios a una población de 135.000 habitantes en los 21 municipios de su demarcación.
Sánchez Bugallo: «Esta intervención é absolutamente necesaria»
«Está é unha estupenda noticia, largamente esperada, largamente desexada e absolutamente necesaria». Así arrancaba el alcalde su intervención, en la que recordaba que la ciudad llevaba cerca de veinte años reclamando mejoras en unas dependencias en las que, con tan solo una visual externa, salta a la vista que sus carencias vienen de muy atrás. La propia presidenta de la Siepse reconoció que eran evidentes desde hacía tiempo las necesidades de este recinto para disponer de instalaciones «dignas y modernas» y asumió que también en más de una ocasión se dijo que se haría y no fue así, pero ahora «ya no tiene vuelta atrás», porque no solo está en licitación (el viernes acaba la presentación de ofertas), sino que esta sociedad la tiene presupuestada en el Plan de Infraestructuras para la Seguridad del Estado, dotado con 275 millones para infraestructuras de este cuerpo. En él se prevén mejoras también en Corcubión, Monforte, Xove, Verín, A Rúa y Porriño.
El cuartel tiene 80 viviendas, pero buena parte están en muy mal estado y solo se ocupan 37. Trabajan en él unas 115 personas y agrupa las unidades de tráfico, seguridad ciudadana, intervención de armas, policía judicial y equipo de delitos informáticos.