La renovación total de los autobuses urbanos tendrá que esperar al 2025

r. m. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Autobús accidentado hace un mes en la cuesta de As Rodas
Autobús accidentado hace un mes en la cuesta de As Rodas XOAN A. SOLER

El alcalde calcula que solo la resolución del concurso, aún sin convocar, llevará un año

10 nov 2022 . Actualizado a las 17:39 h.

La renovación total de la flota de autobuses del transporte urbano tendrá que esperar hasta principios del 2025. Finales del 2024, en el mejor de los casos. Y eso contando con que se licite en enero próximo. Esa es la proyección de los plazos que maneja ahora mismo el Ayuntamiento. La futura adjudicataria tendrá doce meses para aportar los 58 autocares que habrán de cubrir el servicio de la concesión, pero la resolución del concurso previo, que todavía no se ha abierto, implicará otro año, según el cálculo que hizo el alcalde, Xosé Sánchez Bugallo, ayer en el programa Voces de Compostela, de Radio Voz.

El Ayuntamiento prevé licitar el nuevo contrato en enero, siempre que la Comisión Nacional de Evaluación, que ha de emitir un informe preceptivo sobre su estudio económico, no ponga ninguna pega. A partir de ahí, el alcalde valora que la adjudicación lleve en torno a un año, contando con que a lo largo de ese proceso aparezca algún recurso, aunque espera que en ningún caso sea suspensivo, lo que lo paralizaría. Eso sitúa a principios del 2025 la disposición de la nueva flota, que ha de incorporar vehículos más sensibles con el medio ambiente: al menos trece eléctricos y el resto, de bajas emisiones.

Sin embargo, las condiciones de la actual flota habrán de mejorarse con antelación a esa renovación. El nuevo contrato exigirá a la concesionaria que aporte otros vehículos en tanto no lleguen los definitivos. «Polo tanto, aínda que non sexan os definitivos, si serán xa autobuses noutras condicións que as que temos neste momento», afirmó el alcalde ante los micrófonos de Radio Voz, aunque la situación exige tomar otras medidas previas. El grado de envejecimiento de la flota ha obligado a buscar soluciones provisionales antes de las transitorias que pueda aportar el futuro contrato. Y en eso está Raxoi. El Ayuntamiento está indagando la posibilidad de incorporar entre 8 y 10 autocares que suplan a los dos incendiados en los últimos meses y asuman el recambio de otros que haya que retirar por averías, ya sea de forma puntual o permanente.

La alternativa con más probabilidades es la de alquiler, aunque se está encontrando con que los autocares nuevos solo se ofrecen en leasing con precios «desproporcionados» y que los de segunda mano acumulan cierta antigüedad. Entre estos se están valorando los retirados en Bilbao, con una antigüedad de doce años. La media de Santiago está en los 13, lo que para el alcalde no es una diferencia excesiva con la estatal (10), dijo en Radio Voz. El resto de la flota continuaría en uso hasta la nueva concesión. El regidor precisa que «en circunstancias razoables, un autobús ben conservado, que ten que superar a súa ITV cada 6 meses, debera funcionar razoablemente ben e con seguridade».

Bugallo no oculta que es complicado dar con esas alternativas. «As empresas din que non teñen autobuses», dijo. Y apunta que «temos que insistirlle ao concesionario de que a obriga que ten asumida, porque así o di o contrato, de facer unha revisión diaria de cada bus se faga nas mellores condicións posibles para asegurarnos de que un autobús que se revise esta noite non falle mañá».