El alcalde de Santiago apela a la «sinceridade» de la oposición para saber si respaldará el centro logístico

r. martínez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Sandra Alonso

La Xunta de Goberno aprobó inicialmente el plan especial para su implantación, pero la decisión última será del pleno

26 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La Xunta de Goberno aprobó ayer de forma inicial el plan especial para la implantación en Mallou de la plataforma logística de reparto de mercancías del casco viejo. Ese trámite permitirá poner en marcha el proceso para su construcción en la parcela municipal en la que confluyen las avenidas del Cruceiro da Coruña y de Asturias, pero no garantiza que el proyecto salga finalmente adelante. La decisión última no es del gobierno, sino de la corporación. Y esta no se pronunciará antes de octubre.

El expediente no estará en condiciones de ir a pleno hasta entonces para su aprobación definitiva y, ahora mismo, con la contestación social que hay en el barrio por esa ubicación, no se sabe qué podrá decidir la oposición en ese momento, aunque la desestimación del proyecto suponga la pérdida de los cuatro millones de ayuda europea —confirmada esta misma semana— para levantar esa planta.

De ahí que el alcalde quiera saber ya si hay posibilidad de que el proyecto prospere entonces, o no. De no hacerlo se perdería esa subvención, pero el Ayuntamiento incurriría también en gastos que tendría que asumir por su cuenta si decayese. Bugallo entiende que no tendría sentido seguir si se va a encontrar con una posición de bloqueo, por lo que ayer pidió «un esforzo de sinceridade e responsabilidade» a la oposición en una junta de portavoces previa a la reunión de la Xunta de Goberno. En este caso no precisa el apoyo expreso de alguno de los grupos mayoritarios de la oposición, como en la operación Peleteiro. Le llegaría con la abstención del PP o de CA, pero el voto negativo de ambos tumbaría el proyecto, cuyo plan especial se someterá ahora durante dos meses a exposición pública.

Los vecinos, que hace días presentaron más de mil firmas en contra de esa ubicación, tendrán ocasión de alegar en ese período, aunque el alcalde espera convencerlos de que ese proyecto es una oportunidad para poner fin al caos de distribución en el casco viejo y para el propio barrio. El día 3 acudirá a Meixonfrío para explicarles en detalle la iniciativa y resolver dudas. El alcalde, que cree que los vecinos tienen «mala información», trató de minimizar ayer el impacto del centro logístico, en una comparecencia con la técnica responsable de Planeamento del Concello. Apuntó que la nave apenas ocupará un tercio de la parcela y que su altura no superará la de la casa más próxima, dado que, por la orografía de la finca, siete metros estarán por debajo de la cota de la calle Mallou. La nave tendrá 15 dársenas, pero el tráfico pesado entraría y saldría por al avenida de Asturias. Por la rotonda de Meixonfrío solo saldría el ligero, vehículos de 3.500 kilos y cero emisiones.

Bugallo insiste en que la de Mallou es la ubicación «idónea» por distancia y comunicación con el casco viejo. Que no hay alternativa que la supere y que, en cualquier caso, tampoco habría tiempo para tramitar otro plan especial en otro sitio.

PP, CA y BNG pulsarán la posición vecinal en Meixonfrío

La respuesta de la oposición urge. La contratación de los proyectos ha de iniciarse antes del 15 de junio, según los plazos de la ayuda europea, pero el 7 el alcalde tiene una reunión con la secretaria de Estado de la que depende esa subvención «e teriamos que saber a que nos podemos ater». De momento no tiene contestación, pero eso no quiere decir que la oposición no se haya manifestado. Sí lo ha hecho. Y en tono crítico por apelar ahora a la premura de tiempo cuando tenía que haber abordado la cuestión antes con ellos, apuntan. «Pide lealtad, pero antes hubo ninguneo», dice el portavoz del PP, Sánchez-Brunete, que afirma que su formación no alentará «el populismo obstruccionista» en el barrio, pero sí ponderará la respuesta social en la zona, aunque entiende que la cuestión ya no es dónde irá la plataforma, sino si será viable, lo que el gobierno no ha despejado aún, dice.

Desde CA, que contrastará el parecer de los vecinos, entienden que Bugallo intenta «repartir culpas de maneira preventiva» y que «no canto de dialogar prefire presionar» con unos fondos europeos «que a día de hoxe están xa en serio risco, non polo que faga a oposición, senón polo que deixou de facer o goberno». El BNG reclama diálogo con vecinos y oposición y que el gobierno «deixe de tirar para diante sempre» al margen de estos.