El nudo de Concheiros, en Santiago, tendrá carril único entre las nuevas rotondas de Rodríguez de Viguri y avenida de Lugo

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO

SANTIAGO CIUDAD

Tanto en la nueva plaza de Concheiros como en las avenidas de Lugo y Rodríguez de Viguri hay actualmente dos carriles por cada sentido
Tanto en la nueva plaza de Concheiros como en las avenidas de Lugo y Rodríguez de Viguri hay actualmente dos carriles por cada sentido XOAN A. SOLER

El alcalde no espera más y toma la decisión para reducir la velocidad y proteger a los peatones

21 may 2022 . Actualizado a las 22:21 h.

Tras conocer los datos de los radares informativos instalados en Concheiros, que han revelado que el 35 % de los vehículos que pasan por el nudo superan los 30 kilómetros de velocidad, el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo (PSdeG), no quiere esperar más. El balance de una única semana de controles ha sido suficiente para el que regidor anuncie que «con total seguridade» se va a reducir a un solo carril el tramo comprendido entre las dos nuevas rotondas creadas en Rodríguez de Viguri y la avenida de Lugo. El otro quedará reservado para autobuses y «outro tipo de vehículos», una categoría en la que sin duda entrarán también los taxis.

La medida ya había sido apuntada como posibilidad días atrás por el concejal de Mobilidade, Gonzalo Muíños, para intentar evitar los excesos de velocidad que se están detectando en el nudo de Concheiros, con el peligro que conlleva por tratarse de un punto atravesado por cientos de peregrinos que cada día entran a la ciudad por el Camino Francés. En la recámara, el Concello se guarda otra bala, la de colocar un radar pero no informativo, como los dos ya instalados y que empezarán a funcionar la semana que viene, sino de los que multan a los infractores.

 Bugallo confía en que no será necesario tener que colocar un radar sancionador y está convencido de que la reducción a un solo carril por sentido —ahora son dos— será determinante para que los conductores levanten el pie del acelerador. La Xunta, que es quien ejecutó la obra de reforma del nudo de Concheiros, ya señaló que no habrá ningún problema en tomar esta medida si el Concello lo plantea. Ambas administraciones coinciden en que, más allá de otras cuestiones, lo principal es la seguridad de los peatones.

No cree el alcalde que eliminar uno de los dos carriles en el tramo planteará un problema de tráfico, ya que los datos de los que dispone la Policía Local señalan que por el eje Rodríguez de Viguri-Concheiros-avenida de Lugo circulan unos 8.600 vehículos de media en jornadas laborales, muy lejos de los 12.000 en los que la Unión Europea (UE) fija el límite para recomendar que una vía cuente con dos carriles.

Para el regidor compostelano, los datos de los radares informativos no han sido «especialmente alarmantes», ya que reflejan que casi el 99 % de los conductores no supera los 50 kilómetros por hora, pero, como él mismo reconoce, en este tramo el máximo permitido son 30 en la vía y solo 20 en la plaza, por lo que «é necesario actuar para reducir a velocidade». De ahí que no se espere más y se apueste por el carril único.

Además, en el gobierno local existe preocupación por cómo afectará al tráfico la próxima apertura de la calle Concheiros, también en obras, porque serán más los vehículos que cada día transitarán por el nudo. Bugallo también anunció que la decisión de que la vía sea de doble sentido es firme porque es el compromiso que adquirieron en su día con la asociación de vecinos del barrio. Una palabra dada que el alcalde no quiere romper y a la que se su suma que este vial es imprescindible para garantizar los accesos a otras calles, como la de Lagartos, así como para no entorpecer el transporte escolar del colegio La Salle.

Mejor señalización para evitar posibles atropellos en la plaza

Desde que la obra del nudo de Concheiros —que aún no está finalizada— cobró forma, se puso de manifiesto que la nueva configuración de la gran plaza que sustituye al antiguo cruce iba a suponer un problema porque los muchos peatones y peregrinos que cada día cruzan por este punto parecían confundidos y sin saber por dónde y cuándo pasar. El peligro de atropello existía, por lo que la Xunta reaccionó rápido aumentando la intensidad de la franja de luz roja instalada en el suelo y que actúa como semáforo. Sin embargo, el Concello quiere mejorar aún más la señalización para evitar un accidente que, no obstante, el alcalde recalca que aún no se ha producido pero que también se prevendrá logrando reducir la velocidad de paso por este punto.