Cruz Roja y Universidade de Santiago investigan cómo combatir la soledad no deseada de las personas mayores

j. g. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Trinidad de Lorenzo, Fidel Martínez, Carlos Dosil y Montserrat Sánchez-Agustino durante la presentación del «Estudio sobre el impacto de la covid-19 en la calidad de vida de las personas mayores»
Trinidad de Lorenzo, Fidel Martínez, Carlos Dosil y Montserrat Sánchez-Agustino durante la presentación del «Estudio sobre el impacto de la covid-19 en la calidad de vida de las personas mayores» CEDIDA

Hay más mujeres que viven sin compañía, pero esa situación tiene un impacto más negativo en los varones. Presentaron un estudio sobre cómo afectó la pandemia a la calidad de vida en las edades más avanzadas

06 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay un mayor número de mujeres que viven sin compañía; pero la soledad no deseada tiene un impacto más negativo en los varones, que son menos resilientes y tienen mayores dificultades para afrontarla. Este será el tema central que este año articulará las actividades y la investigación de la Cátedra Cruz Roja-USC (Universidade de Santiago de Compostela), según se avanzó en la presentación de su programación anual. Buscarán estrategias para combatirla y contribuir a una mejor calidad de vida de las personas de edades avanzadas.

«Sabemos que a soidade ten un impacto non precisamente positivo na saúde física e mental das persoas, tamén no seu benestar. Tamén é un fenómeno que vai moi asociado a unha perda ou unha incapacidade para dispor de suficientes apoios. E isto tamén fai que nas persoas maiores se asocie a unha perda de dereitos e oportunidades, que nunha época ou situación de vulnerabilidade pode agravar a súa situación», afirmó el profesor Arturo X. Pereiro Rozas, director de la cátedra. Otros temas que prevén priorizar en su trabajo son el buen trato, la accesibilidad, el uso de las tecnologías o los aspectos determinantes en la permanencia en el domicilio.

La cátedra presentó el Estudio sobre el impacto de la covid-19 en la calidad de vida de las personas mayores. Pone en valor la necesidad y la influencia positiva del contacto social, en persona o a través de Internet; y del apoyo del entorno en la calidad de vida de las personas mayores, tanto las que viven en domicilios como en residencias, tras analizar su situación durante la pandemia. «En el contexto de una situación devastadora y sin precedentes, la Cátedra Cruz Roja Española para la mejora de la calidad de vida de las personas mayores consideró oportuno aportar una investigación en torno al impacto de la covid-19 sobre un colectivo especialmente vulnerable», resalta el documento. La publicación la dirigió Fidel Martínez Roget, profesor de la Facultade de Economía de la USC, y como coautores figuran Manuel Gandoy Crego, Lorena López Rodríguez y Belén Vázquez Sampayo.

El estudio y sus conclusiones las presentó Fidel Martín. Constata como las personas mayores han mostrado descontento «con las imágenes estereotipadas y negativas proyectadas de ellas y que relacionan vejez con enfermedad, deterioro o carga social. Esto es algo que debería cuidarse, dado que, en caso contrario,, podrían estar reforzando el edadismo».

El estudio destaca asimismo como «a partir de las percepciones de las personas mayores en relación con la red de apoyo y la solidaridad durante la pandemia se pueden extraer algunas conclusiones positivas de esta crisis. Una de ellas es el apoyo ofrecido por los familiares y las amistades próximas, la otra es la respuesta de las entidades de voluntariado y el entorno social más cercano. La pandemia ha contribuido a reforzar la empatía y ha fortalecido las relaciones sociales y la solidaridad intergeneracional. Si las personas mayores gallegas han pasado con éxito el confinamiento es en parte debido a esa red de apoyo. Habrá que seguir trabajando para mejorar la sensibilidad interpersonal y el compromiso social en relación a las personas mayores».

 En el encuentro también participaron Carlos Dosil Díaz, profesor de la Facultade de Psicoloxía de la USC, quien se refirió al impacto psicológico y funcional del confinamiento en adultos mayores que viven en residencias. Presentó al respecto las aportaciones del estudio Resicovid. Además, Montserrat Sánchez-Agustino, farmacéutica y subdirectora de la Cátedra de la Cronicidad de la USC, comentó el proyecto Higea, que tiene como objetivo conectar pacientes con covid mientras permanecen ingresados en el Hospital Clínico de Santiago con sus familias. Este proyecto recibió incluso el reconocimiento de premios. La sesión la coordinó Trinidad de Lorenzo, secretaria técnica de la Cátedra Institucional Cruz Roja para a mellora da calidade de vida das persoas maiores, de la USC.

Carmen Colmeiro Rojo, presidenta de la Cruz Roja en Galicia, destacó que pretenden «unir experiencia e innovación» con la actividad de esta cátedra en la USC. Pretenden asimismo colaborar con otras cátedras y departamentos con los que comparten objetivos, como la Cátedra de la Cronicidad, según se indicó. El vicerrector Gumersindo Feijoo resaltó que estas cátedras institucionales son un elemento interesante para la transferencia de conocimiento desde la USC y tienen entre sus funciones el fomento del debate y la investigación que sirvan para la toma de decisiones que permitan avances sociales.