El vino alemán que sorprende en Galicia se vende en una vinoteca de Santiago

Hace 13 años cambió las aguas del Sena por las del Sar y se desplazó con 24 años a vivir a Galicia, dejando atrás su vida en París. Tras superar el lógico período de adaptación, en el que incluso tuvo que aprender el idioma, Delphine Jean reconoce que en «Galicia se vive muy bien. Cuando vivíamos en París me hablaban de un sentimiento, después supe que le llamaban morriña, y era lo que no permitía a mi pareja vivir lejos de aquí». Su adaptación actual es plena, pero profesionalmente se mantiene unida a su Francia natal. Delphine creó la empresa de importación de vinos y productos gourmet Sumptuos, que durante años operó solo en la web, y en enero del 2021 dio el salto al comercio físico, con la apertura de un establecimiento en el Ensanche. En su oferta de vinos hay referencias gallegas, nacionales e internacionales, «porque desde el principio tuve claro que debía aportar algo distinto a la competencia. Tengo la exclusividad en importación de Francia tanto en vinos como en champán», comenta. Cuando se le pide que escoja un vino gallego, Delphine nombra inmediatamente «el Ribeiro de Manuel Rojo, para mi el mejor blanco de Galicia, que fue premio Acio de Ouro 2021». De entre todos los caldos internacionales —entre los que los franceses ocupan un lugar destacado— la empresaria elogia el vino alemán «Markus Molitor Pinot Noir, que sorprende a quien lo prueba. Los vinos alemanes son grandes desconocidos, y la gente se sorprende por su calidad. Estas Navidades salió muy bien». Otro por el que apuesta a ciegas es el Sizeranne-Hermitage de Mr Chapoutier, «que fermenta dentro de una cuba de madera abierta». Los más caros son los californianos e italianos, «aunque para caros un Vega Sicilia que se vendió en 480 euros». Como no se vive solo de vino, en Sumptuos también es posible adquirir embutidos, conservas, chocolates, aceites de oliva, galletas, mermeladas y un chuletón de vaca, frisona o extra premium, de Carnes Rojas de Galicia, que se venden desde 25 a 45 euros el kilo. Es una carne envasada al vacío, que Delphine considera «una de las mejores del mundo». La empresaria no se limita a la venta, ya sea directa o por internet, y también organiza catas y degustaciones para dar a conocer productos desconocidos y ampliar los conocimientos del público gallego. Esta semana hubo dos degustaciones, una de vino y otra de café Mori, tostado en Santiago. En 15 días habrá más catas para grupos muy reducidos.

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