La plaga del picudo rojo pone en riesgo de tala varias palmeras del centro de Santiago

Margarita Mosteiro Miguel
Marga Mosteiro SANTIAGO

SANTIAGO CIUDAD

XOAN A. SOLER

Un informe resolverá qué solución se da a las de Carreira do Conde y San Roque

03 feb 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La plaga del picudo, que ha causado estragos en los municipios de la costa gallega, se extiende rápidamente por las palmeras de Santiago, y cada vez son más los ejemplares que dan evidentes señales de que su muerte está próxima. Si hace casi un año una de las palmeras de Carreira do Conde fue de las primeras en avisar del peligro, ahora son cuatro de esta misma calle las que están afectadas por el temido escarabajo de origen asiático. Las de Carreira do Conde presentan las hojas caídas y de color marrón, que son los dos síntomas más evidentes del daño de la invasión del picudo en la yema de la palmera.

En Fontiñas, también todo empezó por una palmera situada en la zona verde en la esquina entre las rúas París y Fontiñas, pero ahora dos perdieron sus hojas, y sus yemas están bajo vigilancia. Lo mismo ocurre en la zona verde de San Roque frente al colegio La Salle, donde se colocó una cinta alrededor de la palmera situada junto a la escuela infantil, con el fin de establecer un cordón de seguridad ante el peligro de que caiga alguna de las ramas. En este caso, la concejala de Medio Ambiente, Mila Castro, dijo que los técnicos están pendientes de un informe sobre el estado del tronco, y si se confirma que el daño es irreversible, se retirarán para evitar riesgos a las personas que habitualmente cruzan por este lugar. Es probable que se quiten las hojas antes de que se desplomen.

XOAN A. SOLER

En el jardín de una casa de Pelamios hay otra palmera que, por su aspecto, está claramente afectada por el picudo. En la rúa Touro, otro grupo situado delante de los edificios en un espacio verde público están siendo vigilado por los técnicos municipales ante el temor a que una de ellas pueda tener en su interior algún escarabajo.

Desde que en marzo del año pasado saltara la alarma, el departamento de Parques e Xardíns está pendiente de todas las palmeras, y colocó en las yemas de todas unos dispositivos para monitorizar su estado, y actuar con rapidez en caso de infección.

Mila Castro, concejala de Medio Ambiente, explicó que se está pendiente de todas ellas para intentar frenar la plaga. Los técnicos optaron por poner un tratamiento para intentar que no se vean afectadas por el picudo o, en caso de invasión, paliar los daños y salvar los ejemplares. Aun así, la concejala cree que será difícil salvar todas las palmeras dañadas, y probablemente algunas tendrán que ser retiradas en su totalidad. 

XOAN A. SOLER

El escarabajo rojo se alimenta de la parte tierna del tronco y la copa

El picudo rojo o escarabajo asiático se alimenta de la parte tierna del tronco y de la copa de la palmera. Lo hace de una manera voraz al tener una fuerte mandíbula, que abre galerías y cavidades. En este proceso seca la palmera, que pasa a tener un color marrón. El tronco suele quedar en pie, al no verse afectada la raíz. En el caso de la palmera, a diferencia de los árboles, no es posible cortar una rama para salvar las otras, ya que solo tiene un yema de la que salen las hojas. Cada hembra de picudo puede poner 400 huevos, y se propaga fácilmente por ser un insecto volador.