Los radares que no multan de Santiago logran reducir la velocidad en Cruceiro do Sar y Xoán XXIII

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO DE COMPOSTELA

SANTIAGO CIUDAD

El radar informativo colocado en la avenida de Xoán XIII en sentido centro de Santiago
El radar informativo colocado en la avenida de Xoán XIII en sentido centro de Santiago PACO RODRÍGUEZ

En el tramo entre San Caetano y San Francisco el 88 % de los conductores circula a menos de 40 kilómetros por hora

21 ene 2022 . Actualizado a las 23:45 h.

Un éxito. Y rotundo. Ese es el balance del funcionamiento de los radares informativos instalados en la calle Cruceiro do Sar y la avenida de Xoán XXIII. Los dispositivos, también llamados pedagógicos porque en lugar de multar a los infractores dan las gracias a los que cumplen, son la más firme apuesta de la concejalía de Mobilidade de Santiago para mejorar la seguridad vial en la ciudad y han conseguido rebajar más que sensiblemente la velocidad a la que se circula en ambas vías, según demuestran los informes de la Policía Local.

Especialmente buenos son los registros que se han obtenido en Xoán XXIII. El estudio efectuado por los responsables del cuerpo municipal abarca desde el 16 de noviembre del 2021 y el pasado día 11 y reflejan que más del 88 % de los conductores circulan a menos de 40 kilómetros por hora en esta vía y que más del 60 % cumplen con el nuevo límite de velocidad a 30.

En ese período, el informe contabilizó 46.437 vehículos en sentido saliente, es decir, que circulaban desde San Francisco hacia San Caetano. De ellos, 28.090, el 60,49 % del total, pasó por el radar a menos de 30 kilómetros por hora y otros 12.934 (27,85 %) lo hicieron a una velocidad de entre 31 y 40. Otros 4.047 conductores (8,72 %) marcaron entre 41 y 50, lo que significa que el 97,06 % de los vehículos en este punto iban a menos de 50.

Los que superan los 50 kilómetros por hora, el antiguo límite de velocidad, son verdaderamente muy pocos. Solo 884 (1,90%) circularon entre 51 y 60, 290 (0,62 %) entre 61 y 70 y nada más que 192 (0,41 %) entre 71 y 80.

En sentido entrante, de San Caetano hacia el párking de Xoán XIII, se controlaron en esas mismas fechas 75.723 vehículos. De ellos, 46.825 circulaban a menos de 30 kilómetros por hora, el 61,84 %, mientras que otros 19.883 (26,26 %) lo hicieron entre 31 y 40 y otros 7.231 (9,55 %) entre 41 y 50, por lo que el total de conductores que pasaron a menos de 50 se eleva al 97,65 %. Por encima del antiguo límite de velocidad para vías urbanas, se registraron pocos vehículos. Solo 1.476 (1,95 %) entre 51 y 60, 266 (0,35 %) entre 61 y 70 y 42 (0,06 %) entre 71 y 80.

En Cruceiro do Sar los resultados no son tan contundentes pero sí buenos. En este caso el estudio fue más extenso, ya que abarcó del 22 de junio al 26 de octubre del 2021. En sentido salida de la ciudad se contabilizaron 166.669 vehículos. De ellos, 41.861 (25,12 %) pasaron a menos de 30 kilómetros por hora y otros 58.428 (35,06 %) a entre 31 y 40, mientras que otros 46.224 (27,73 %) lo hicieron a velocidades de entre 41 y 50, lo que significa que más del 97 % cumple con el antiguo límite.

En sentido entrada a Santiago, el radar informativo detectó en esas mismas fechas el paso de 167.655 vehículos, de los que 27.299 (16,28 %) iba a menos de 30 kilómetros por hora y cumplían con la limitación actual. Otros 55.464 (33,08 %) circulaban a entre 31 y 40 y otros 57.434 (34,26 %) lo hicieron a entre 41 y 50, por lo que el 88,62 % no superaba el límite que estaba vigente hasta hace muy poco.

Por encima de los 50, a velocidades ya peligrosas para zonas urbanas, circulan muy pocos conductores en Cruceiro do Sar. En sentido salida, el radar informativo solo captó a 15.541 (9,32 %) entre 51 y 60 y a 4.615 (2,77 %) a más de 61. En dirección Santiago, 21.633 coches (12,9 %) iban a entre 51 y 60 y solo 5.825 (3,47 %) a más de 61 kilómetros por hora.

En la ciudad ya se han controlado nueve puntos con estos dispositivos

El concejal de Mobilidade de Santiago, Gonzalo Muíños ( PSdeG), ya anunció cuando se instalaron los primeros radares informativos en la ciudad que iba a apostar por estos dispositivos y así lo ha hecho. Desde entonces, ya han sido nueve los distintos puntos de la ciudad que se han controlado con estos dispositivos, que como son totalmente portátiles —pesan menos de 10 kilos y tienen baterías solares— pueden cambiarse fácilmente de ubicación en función de las necesidades de cada momento.

En algunas vías, como la avenida de Castelao y la de Xoán XXIII o la calle Cruceiro do Sar, se han colocado dos dispositivos, uno en cada sentido de la circulación, para obtener datos del paso de vehículos tanto en dirección entrada como salida. En los otros puntos donde se han colocado solo se instaló uno de estos radares que no multan. Fue en Poza de Bar, Entrerríos, As Salvadas, la calle de A Estrada, la de Lisboa y Antón Vilar Ponte.

El último lugar en el que se ha instalado uno de los radares ha sido en la calle Lisboa, en Fontiñas, una vía con fuerte pendiente, por lo que la concejalía de Mobilidade lo ha ubicado en sentido bajada, y aunque todavía no hay un estudio concreto de la Policía Local, la sensación es que también se ha reducido notablemente la velocidad media. «Estamos muy satisfechos porque los conductores cumplen y frenan cuando pasan por estos radares pese a que saben que no multan», señala Muíños. Además de su demostrada eficacia en la mejora de la seguridad vial, son una gran fuente de información, ya que contabilizan cada uno de los vehículos que pasan, pero también el día, la hora y la velocidad.