El barrio de Meixonfrío, en Santiago, entre lo urbano y lo rural

Margarita Mosteiro Miguel
Marga Mosteiro SANTIAGO

SANTIAGO CIUDAD

Las nuevas promociones de viviendas unifamiliares acercan esta zona a su aspecto más rural frente a las edificaciones de viviendas protegidas

10 nov 2021 . Actualizado a las 18:51 h.

Meixonfrío podría definirse como el último barrio urbano y primero del rural del norte de Santiago. La rúa Lindeiro es el vivo ejemplo de la fusión de lo urbano con lo rural. En parte de la calle conviven construcciones rurales antiguas con otras de los años 70 y 80 del siglo pasado, y con los edificios protegidos levantados a partir del 2000. En otras calles del barrio, como en la rúa dos Porróns, se está ampliando el número de viviendas unifamiliares. Unas son individuales y de gran tamaño, y otras, más pequeñas y con espacios verdes privados a su alrededor. La rúa Agra de Arriba tiene más aspecto rural, al igual que una parte de la rúa Meixonfrío por donde discurre el Camino Inglés. En esta última calle, las casas restauradas relucen junto a una apuntalada y a otras donde los aperos de labranza y la maquinaria dejan clara la actividad de sus propietarios.

Como en casi todos los barrios de la ciudad, el estado del pavimento es una de las principales causas de queja de los vecinos. En la rúa dos Porróns, con edificaciones en marcha, el asfalto está muy deteriorado. Tanto que, en algunos puntos, el barro cubre la calle. En las rúas Meixonfrío y Lindeiro también se precisa una intervención para evitar que el daño en la calzada —por ahora menor en Lindeiro— derive en grandes baches al final del invierno. En la rúa Meixonfrío, concretamente en el tramo incluido dentro del núcleo rural, están implorando la llegada de la brigada de Vías e Obras.

Aunque no es exactamente Meixonfrío, las recientes obras de mejora de la avenida Asturias favorecen los desplazamientos de los vecinos, que desde la zona de Salgueiriños acuden a realizar compras al supermercado Gadis ubicado en la rotonda.

Buen parque infantil

De lo que puede presumir el barrio es de tener uno de los mejores parques infantiles de la ciudad. Los elementos no solo están en buen estado, sino que el suelo de césped artificial no presenta daños a simple vista. Es de suponer que, por su ubicación junto a los edificios protegidos, tendrá una ocupación alta. En el lado negativo está la falta de actividad comercial. En la zona del barrio más próxima a la rúa Tambre, se limita a unos pocos locales de hostelería. Y en los bajos comerciales de los bloques públicos el movimiento comercial es casi cero. Para encontrar actividad comercial hay que acercarse a la rotonda de Meixonfrío, donde, además de ese supermercado Gadis, operan una peluquería, una empresa de reparto, una lavandería y un bar. Además, hace unas pocas semanas se inauguró un nuevo restaurante especializado en carnes.

Meixonfrío dispone de un centro sociocultural, el de Casa Agraria, que fue construido por los mismos vecinos y en el que se vienen organizando actividades culturales, de ocio y tiempo libre desde hace décadas. Año tras año, es el centro de las fiestas del barrio, en las que participan activamente los vecinos.

No parece que el aparcamiento sea un problema en Meixonfrío, donde las casas unifamiliares disponen de espacio para los vehículos y los edificios tienen garaje comunitario. En la rotonda de Meixonfrío hay una zona de aparcamiento, que hace años se presentó como disuasorio. En esta área acampan con mayor o menor frecuencia furgonetas camperizadas y autocaravanas, aunque también sirve de párking para una empresa de reparto y para vecinos de fuera de Santiago, que dejan sus coches en este espacio para emplear el transporte urbano en sus desplazamientos por la ciudad.