Once fiestas en pisos, 17 multas y grupos disueltos a la salida de las discotecas en una nueva noche de movida en Santiago

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO

SANTIAGO CIUDAD

La Policía Local de Santiago, en uno de los operativos por la movida nocturna
La Policía Local de Santiago, en uno de los operativos por la movida nocturna Sandra Alonso

La Policía Local también sancionó por alcoholemia positiva a un conductor que a las 23 horas tenía la música puesta a todo volumen en su coche en la Praza Roxa

09 oct 2021 . Actualizado a las 00:02 h.

La del jueves al viernes no fue una madrugada que pueda calificarse como tranquila en Santiago, porque la Policía Local tuvo que disolver a más de un millar de jóvenes que se habían quedado formando grupos numerosos en las calles cuando a las cuatro de mañana cerraron las discotecas, pero sí puede decirse que la noche se desarrolló dentro de unos parámetros previsibles teniendo en cuenta que era previa al puente de la Hispanidad. La realidad es que no hubo que lamentar incidentes graves ni alternados y que el dispositivo que integran los agentes municipales junto a la Policía Nacional y la Autonómica funcionó a la perfección, como viene siendo habitual desde que el Concello solicitó a la subdelegación del Gobierno refuerzos para las jornadas más complicadas de la movida, que son las de los miércoles, jueves y los fines de semana.

En lo que a sanciones se refiere, las patrullas de la Policía Local impusieron un total de 17 a otras tantas personas que protagonizaron conductas incívicas y que además están prohibidas por las ordenanzas municipales, como consumir alcohol en la calle, hacer ruido y molestar a los vecinos u orinar en la vía pública.

Esta vía, de la estar muy encima de los jóvenes que salen por las noches y multar a aquellos que se saltan las normas, es en la que va a incidir el Concello de Santiago para intentar poner coto a los desmanes de la movida nocturna, consciente de que con la reapertura del ocio nocturno los jóvenes van a volver a salir de noche y que será inevitable que estén en la calle.

El cuerpo de seguridad municipal también sigue muy atento a las fiestas en pisos porque son también uno de los principales focos de problemas, ya que causan muchas molestias a los vecinos que las sufren. En la noche del jueves al viernes fueron nada menos que once las sanciones tramitadas, que pueden ser de 200, 500 o 750 euros en función de la hora a la que se estuviese excediendo el máximo límite de ruidos permitido.

Los mayores problemas volvieron a surgir cuando a las cuatro de la madrugada cerraron las discotecas y locales y los jóvenes se quedaron concentrados en la vía pública. La Policía Local tuvo que disolver a unos 500 en la calle Curros Enríquez, en la que se encuentra el Ruta, uno de los locales que lleva semanas abierto y en el que casi todas las noches, salvo los lunes, es necesario intervenir, aunque sin que se produzcan altercados salvo aquella madrugada del 24 de septiembre en la que había 2.000 personas que se negaron a marcharse y algunas de ellas lanzaron vasos y botellas a los agentes.

En Alfredo Brañas y República del Salvador, otro punto caliente por la existencia de otros dos locales —La Facultad y Capital—, también fue necesario ordenar a los jóvenes que desalojaran la vía pública. Parte de ese grupo se mostró remolón y se dirigió a la Praza Roxa, donde la Policía Local disolvió a otras 200 personas. También se intervino a las 4.55 horas en el Cantón de San Bieito, donde se encuentra el Avante, para que un grupo más pequeño, de 50 personas, abandonase la vía pública tras el cierre del establecimiento.

Un menor ingresó en el Clínico con una fuerte intoxicación etílica

Uno de los peores tragos que tuvieron que pasar los agentes municipales en la madrugada del jueves al viernes fue el estado en el que se encontraron a una persona menor de edad en la calle Carreira do Conde, a la que tuvieron que auxiliar debido a que presentaba una fuerte intoxicación etílica. Fue a la 1.10 horas y la Policía Local dio aviso a una ambulancia para que trasladase al menor de edad hasta el Hospital Clínico. Además, también puso los hechos en conocimiento de su familia.

Un conductor con la música del coche a todo volumen acabó sancionado por ir ebrio

Además de las 17 sanciones por beber en la calle, hacer ruido u orinar en la calle y las otras once por organizar fiestas en pisos, la noche se saldó también con una multa a un conductor por alcoholemia positiva. El infractor fue visto sobre las 23 horas en la Praza Roxa con la música de su coche a todo volumen y mofándose de los vecinos a los que reprochaba no querer fiesta. La gracieta, finalmente, le salió cara, porque poco más tarde, a las 00.45 horas y tras una persecución, era sancionado por conducir bajo los efectos del alcohol.

En el vehículo viajaban otras tres personas que también fueron identificadas. Una de ellas se negó, por lo que fue sancionado por este hecho y por desobediencia y resistencia a los agentes.

El presidente de la asociación de vecinos Fonseca del casco monumental, Roberto Almuíña, recordó que la zona vieja también padece problemas por la movida, especialmente en la avenida de Figueroa, el Cantón de San Bieito y la zona de Entremuros, por lo que anima a «seguir presionando para que se respecte o dereito ao descanso dos veciños».