Más de 130 colectivos gritan en Santiago su rechazo a convertir Galicia en «unha macrogranxa do vento»
SANTIAGO CIUDAD
Reclaman la paralización de los proyectos de parques eólicos porque denuncian que convierte al medio rural en un «territorio de sacrificio»
07 jun 2021 . Actualizado a las 01:33 h.Al grito de «eólica si, pero non así» más de 130 colectivos han reclamado en la plaza del Obradoiro de Santiago la paralización de los proyectos de nuevos parques eólicos porque los consideran un atentado contra el medio ambiente, el paisaje, los montes y ecosistemas y la vida rural.
La manifestación partió al mediodía de la Alameda compostelana y contó con el apoyo tanto del PSdeG como del BNG, entre otras fuerzas políticas. El acto en el Obradoiro, se inició con un minuto de silencio en lo que lo único que se podía escuchar en la plaza fue el molesto zumbido de un aerogenerador. «Súper riquiño para telo ao carón da casa», señaló con ironía la actriz Patricia Vázquez, que condujo un acto que se desarrolló en un ambiente festivo, con música de gaitas y siguiendo las medidas de seguridad por la pandemia del coronavirus.
El manifiesto fue leído por distintos representantes de los colectivos contrarios al modelo eólico actual que, alertan, convierte a Galicia «nun territorio de sacrificio» y en una «macrogranxa de vento» que aseguran que supondrá «un martirio para as aves, morcegos e espazos naturais», así como la destrucción de montes de alto valor patrimonial y medioambiental.
Denuncian que en torno a las eólicas hay muchas mentiras, como que genera muchos beneficios y puestos de trabajo o fija la población en el medio rural, así como que es una energía limpia y sostenible, algo que niegan porque solo la consideran «renovable» y siempre y cuando se someta al interés social y no al del mercado y las empresas multinacionales y transnacionales, que son las que ven detrás del plan. «Iso é especulación», afirma el manifiesto leído en Santiago, que pide también «outro modelo enerxético».
Tampoco comprenden los colectivos contrarios al nuevo plan eólico la necesidad de instalar las molinos de viento cuando Galicia es la comunidad con más aerogeneradores por habitante del Estado y ya exporta el 30 % de la energía que produce. Ven en esta iniciativa una nueva «colonización enerxética» como la que se produjo durante el Franquismo con la construcción de embalses para las hidroeléctricas «que xa destruiron os nosos ríos e agora apuntan aos nosos montes», advierten.