La investigación descarta el crimen en el caso del hombre que cayó por un patio de luces en Santiago
SANTIAGO CIUDAD
La Policía baraja el accidente o la muerte voluntaria como únicas tesis posibles de lo sucedido en el edificio de Fernando III O Santo
10 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.¿Por qué cayó un hombre de 68 años de edad por el patio de luces del edificio en el que vivía en el número 13 de la calle Fernando III O Santo de Santiago? La investigación policial ha avanzado mucho pese a que ha transcurrido poco tiempo desde que el terrible suceso sacudió al Ensanche a las 18.18 horas del pasado jueves. Una cosa está absolutamente clara: no existe etiología criminal. Es decir, que no se trata de un crimen, por lo que solo puede haber dos explicaciones posibles al incidente: o un accidente o una muerte voluntaria.
La del accidente fue la tesis que cobró más peso en los primeros instantes de la investigación. Y es que el fallecido vivía en uno de los primeros pisos del edificio y tenía herramientas y otros objetos acumulados en el alféizar de la ventana que da al patio de luces. Por ello, los investigadores pensaron que quizás quiso acceder a esta zona común, resbaló, se dio un mal golpe en la cabeza y después cayó al vacío.
Un taburete que estaba junto a la ventana hacía pensar que era el que utilizaba para subir y llevar a cabo esta maniobra, que quizás realizó mil veces hasta que en esta ocasión la mala suerte quiso que resbalase.
La otra opción que está sobre la mesa es la muerte voluntaria, el suicidio. El hombre no dejó nota de despedida y cuando se realizó la inspección ocular en su casa nada hizo pensar en que quisiese quitarse la vida, aunque esta es ahora la principal tesis de la investigación, ya que el informe forense preliminar señala que la causa del fallecimiento es que el señor se precipitó desde el octavo piso por el patio de luces del edificio.
¿Por qué el octavo piso? Si se considera que el fallecido se tiró por una ventana de los pisos altos —del primero no habría altura suficiente para causarse la muerte— solo pudo hacerlo por las que dan al patio de luces desde la zona común, la de las escaleras. Y todas ellas están cubiertas por una reja a excepción de la del octavo. Es decir, si fue accidental, la caída tuvo que producirse desde el primero y si fue voluntaria la única opción es la del piso ocho, el último de este edificio que está situado justo en la esquina entre Fernando III O Santo y la calle de la Rosa, en la zona sur del Ensanche compostelano.
Las lesiones que presentaba el cadáver han resultado fundamentales para dar una explicación a los hechos. Y es que las heridas son de una gravedad compatible con la caída desde el octavo piso y no desde el primero, lo que ha hecho virar la tesis principal de la investigación, que ha pasado del accidente al suicidio.
Cuando los servicios de emergencia fueron alertados de que un hombre había caído por el patio de luces de este inmueble, los primeros en acudir fueron agentes de la Policía Local de Santiago y de los Bomberos de la ciudad, que dieron acceso a los sanitarios del 061, que tan solo pudieron certificar la muerte de la víctima. La Policía Nacional desplegó entonces un amplio dispositivo para acordonar la vivienda e iniciar una investigación que ahora apunta a la muerte voluntaria.