Más de una decena de locales hosteleros lo incluyeron en su carta y pioneros locales como La Cavita amplían ahora su oferta
04 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.1Hasta hace un par de años, muy pocos restaurantes en Compostela servían poke, un plato de origen hawaiano que juega a mezclar en un bol pescado crudo y distintos ingredientes frescos sobre una base de arroz, quinoa o verduras. Marcelo Tejedor fue uno de los primeros apostar por él en Casa Marcelo, donde ya en el 2016 ofrecían su poke picante de atún rojo. Y, en estos últimos años, más de una decena de establecimientos de la ciudad lo han incluido en el menú, siguiendo la moda culinaria de Estados Unidos que luego se instaló en Europa. El abanico de propuestas crece también en la capital gallega, donde La Cavita tiene previsto ampliar ahora su carta de pokes y woks con una marca distinta. Explica Juan López Villanueva, quien junto a su hermano Pablo dirige el grupo de restauración y arquitectura Paul & John (con presencia en A Coruña, Vigo y Santiago), que «a través de los pokes volvió a venir público nuevo a La Cavita. Los hábitos cambian y hay que ir renovando tanto el producto como el propio local, para no estancarse y ser competitivos». El restaurante de San Pedro de Mezonzo especializado en urban food lanzó su primera carta de pokes hace dos años, antes de que proliferase la idea a nivel local, y a partir de este mes lanzarán novedades para perfilar una nueva marca dedicada precisamente a estas recetas. «La Cavita es como nuestro laboratorio, donde ensayamos las cosas antes de dar el paso a nivel gallego a través de nuestra red de distribución», añade Juan.
¿Por qué triunfa tanto el poke? Para él, la clave está en que ofrece «un menú distinto, sano y saludable en un solo plato», visualmente es colorido y atractivo, a la vez que permite combinar los ingredientes al gusto de cada uno y en función de lo que le apetezca más ese día. En su caso, decidieron no jugárselo todo a una única carta y compaginarlos con una elaboración asiática que también es totalmente personalizable como los woks, y así dar más alternativas para satisfacer a todos los miembros de la casa en sus pedidos online. Entre los negocios que dan la opción de disfrutar del poke en su establecimiento, así como en casa a través el envío a domicilio, están A Carrilana (donde el plato hawaiano se convirtió en uno de sus grandes reclamos desde que Natalia y Javi asumieron la gerencia en el 2019), el Santiago Kyoto, A Curtidoría o en la siempre ecléctica La Flor, que el mes pasado se sumaba al servicio de delivery de Obvious Eat, Just Eat y Uber Eats.
Formación y futuro
La sede de Compostela Monumental, en la Algalia de Arriba, acogió ayer el acto de entrega de diplomas a las alumnas del Programa Integrado de Empleo de Compostela Monumental correspondiente al curso 2019-2020, en el que participaron un centenar de mujeres. Presidieron el evento Zeltia Lado, directora xeral de Formación e Colocación de la Xunta, y José Manuel Bello, presidente de la asociación de comerciantes del casco histórico santiagués. Cuatro alumnas (Zoe Calvo, Paula García Andrade, Yolanda Mejuto y Vanesa Vieito) se encargaron representar al resto de sus compañeras, que no pudieron estar presentes a causa de las restricciones por la pandemia. Lado confirmó que el Gobierno autonómico continuará financiando el programa, que obtuvo un 70 % de inserción laboral en su última edición y gracias al cual casi medio centenar de alumnas consiguieron el puesto de trabajo que aún desempeñan en la actualidad.
«Camiñante do lume»
Un santiagués, herrero de oficio y de alma reflexiva, es el último de los testimonios que protagonizan la miniserie Camiñantes do Noso, que recorre el Camino de Santiago a través de la mirada de la experiencia. Santiago Martínez, Chago, pone en valor el papel que jugaron los herreros en Compostela, porque sin ellos los canteros no tendrían herramientas para levantar la ciudad de piedra que espera al final de la aventura jacobea. Habla el santiagués de su oficio, del origen del Camino, de la riqueza arquitectónica de la Catedral o del mensaje que tras ella se esconde: «Estanos contando a evolución de 800 anos, o intercambio de culturas, de pensamentos... tanto no aspecto social como económico e cultural». Dice el artesano que el fuego «engancha», invita a la ensoñación como elemento catalizador de la reflexión y fuente de creatividad: «É un trasno vivo que, cando o avivas con osíxeno, cóntache moitas historias». Chago, el Camiñante do lume e do ferro, repara también en las historias de vida que se cruzan peregrinando a Santiago, un trayecto que humaniza y une a personas de distinta procedencia, creando una «harmonía» entre ellos que cada vez cuesta más encontrar en el día a día. El herrero recuerda a un peregrino que hizo por primera vez el Camino con 70 años tras una pérdida familiar y al descubrir que había más rutas que la francesa se propuso descubrir cada año una nueva. Reconoce que espera volver a verlo para regalarle una pieza, «tosca, porque a pureza está na alma que ten este home».