La Policía asesta un gran golpe al trapicheo de drogas en Santiago y elimina 14 puntos de venta
SANTIAGO CIUDAD
En la operación se ha detenido a 25 personas, de las que trece están en prisión, y se ha logrado devolver a sus dueños dos pisos okupados en Pelamios y el Pexigo
20 dic 2020 . Actualizado a las 01:17 h.En la que es la mayor operación de los últimos tiempos contra el trapicheo de drogas en Santiago, la Policía Nacional ha logrado desmantelar catorce puntos de venta en la ciudad, situados principalmente en los barrios de San Roque, el Ensanche, Fontiñas, Conxo, Cruz de San Pedro, la zona vieja, Belvís, San Caetano y Pelamios. En total, se ha detenido a 25 personas, de las que trece han sido enviadas a prisión provisional tras prestar declaración ante la jueza compostelana que instruye la causa, Ana López-Suevos. A los implicados se les imputan delitos de narcotráfico y pertenencia a grupo criminal.
Además, como la mayoría de las viviendas en las que operaban los traficantes eran okupadas, se ha logrado devolver dos a sus dueños en Pelamios y el Pexigo, donde además se recuperaron dos bicicletas y un ordenador portátil de procedencia ilícita, mientras que en otras se han abierto procedimientos judiciales de recuperación.
La comisaría de Santiago puso en marcha esta gran operación, bautizada como Barrido, a finales del 2019. El origen de las pesquisas, que forman parte del plan de preparación del Xacobeo 2021 de la Policía Nacional, está en las numerosas denuncias vecinales centradas en la venta de drogas en un piso de la zona de San Roque. Al saberse investigados, los camellos se dispersaron por otros lugares de la ciudad, estableciendo nuevos puntos en la zona vieja y en Pelamios, donde además okuparon varios inmuebles.
La Brigada Local de Estupefacientes abrió entonces una laboriosa investigación que ha ido desgranando poco a poco hasta lograr este éxito cuya dimensión queda patente porque ha provocado un desabastecimiento momentáneo de drogas en la ciudad, lo que ha hecho que se hayan detectado movimientos de toxicómanos hacia otros municipios para poder comprar sus dosis. «No obstante, no hay que llevarse a engaño, somos conscientes de que, como si fuese una hidra, en el trapicheo de drogas cortas una cabeza y nacen otras enseguida, lo que no resta importancia al operativo», explica un mando policial.
Las pesquisas no se han limitado a desmantelar los puntos de venta al menudeo en Santiago, sino que los investigadores han tirado del hilo y han logrado identificar también a los intermediarios y a los proveedores, para lo que se han practicado diligencias en la provincia de Pontevedra. Los arrestos se han llevado a cabo, además de en Compostela, en Bastavales (Brión), Mos, Salceda de Caselas y O Porriño.
En Santiago se ha logrado detener a dos de los principales proveedores locales de drogas. Uno es un vecino de la ciudad con numerosos contactos en Cambados, Padrón, Ribeira, Cee y Madrid. La Policía le señala como el responsable de abastecer de cocaína, heroína y hachís a otros traficantes de Compostela y del área metropolitana.
El segundo de los intermediarios en Compostela es un hombre de origen dominicano que, en connivencia con su hermano, eran los responsables de distribuir cocaína en la zona del Ensanche.
La línea de investigación en Pontevedra fue toda una sorpresa para los investigadores, ya que la arrestada es una mujer de 70 años de edad y vecina de Mos que había establecido un piso en O Milladoiro (Ames). Ella se desplazaba varias veces a la semana a Santiago con el fin de abastecer de estupefacientes a vendedores de menor entidad. En esta rama de la operación se ha logrado también identificar al proveedor de esta señora, que es otro vecino de Mos de 68 años de edad que tiene antecedentes por narcotráfico.
Entre los objetos incautados en los registros practicados en los pisos desde los que se vendían las drogas hay suficiente material para conectar a los arrestados con el tráfico de estupefacientes al menudeo. En total, se han intervenido 300 gramos de heroína, 400 de cocaína, cien de marihuana y 75 de hachís, así como 150 pastillas de metadona y 700 gramos de sustancia de corte. Además, se han intervenido alrededor de 60.000 euros en efectivo, 18 básculas de precisión, 26 teléfonos móviles, una pistola detonadora, tres envasadoras de vacío, joyas y dos vehículos. También libretas con anotaciones, muy importantes para lograr condenas una vez que el caso llegue a juicio.