Capacidad e ilusión

Alicia Fernández LA CRIBA

SANTIAGO CIUDAD

11 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Puestos a empezar el curso político habría que demandar a sus actores, como cada año, más seriedad, rigor, sentido común, claridad, profesionalidad -ya que la política es una profesión para muchos-, transparencia, amplitud de miras, flexibilidad, empatía, honradez, constancia y valentía. Incluso educación.

Pero también la capacidad de ilusionar como hace años, de hacer creer en proyectos ambiciosos que supongan en reto en lo colectivo. Una muestra: a mí y a muchos boirenses se nos cae el alma al suelo al ver el edifico de las Colonias, en el corazón de la playa de Barraña (sin duda el mayor atractivo turístico natural del municipio) convertido en sede de entidades sociales ¡Ojo! no porque no sea una necesidad dotarlas de espacios donde desenvolver su actividad orgánica, que lo es, si no porque su ubicación y posibilidades demanda fines más generosos y rentables para nuestro pueblo.

Lo que me hace temblar de inquietud es si el gobierno municipal va a dejarse llevar por la misma desidia y falta de ambición a la hora de fijar los usos del pazo de Goiáns. Y en ese punto recuerdo una conversación con un experto en urbanismo para zanjar un tema similar: «¿Estaría bien una residencia de la tercera edad en el Hostal de los Reyes Católicos? ¡Claro que sí! Pero las posibilidades de su situación y de una construcción singular se verían cercenadas groseramente. Y no por el fin, si no por el despilfarro de destinar cada inmueble de forma ajena a su valor y potencial». Si los responsables locales no creen en sus puntos fuertes, menos lo harán los provinciales, autonómicos o estatales ¡Hay que transmitir ilusión!