La hostelería encaja otro golpe con más recortes ante un otoño incierto
SANTIAGO CIUDAD
Algunos locales faltos de clientes reconocen no verse afectados por la reducción de aforo
08 oct 2020 . Actualizado a las 20:24 h.Las nuevas restricciones aprobadas por la Xunta para la hostelería compostelana se suman a una lista que no deja de crecer. Además de las limitaciones horarias o la regulación para terrazas y fumadores, a partir de ahora el sector tendrá que cumplir con una reducción de aforo del 50 % y ya no podrá servir en barra. La noticia ha sentado como un jarro de agua fría, pero en algunos establecimientos se relativizaba ayer el impacto de estas medidas, sobre todo teniendo en cuenta el descenso de clientes que han sufrido durante el verano y que, a partir de septiembre, se prevé mayor.
La bajada del turismo, sobre todo internacional, ha vaciado la clientela de buena parte de los negocios de la zona vieja, que reconocen que muchos días no alcanzan ni el 50 % de ocupación, por lo que estas nuevas restricciones no les afectan tanto como sí lo hicieron otras, como la prohibición de fumar sin distancias de seguridad. Además, algunos locales ya estaban cumpliendo con estas medidas, como es el caso del Bar Pim Pan, situado en la Praza de Mazarelos. Uno de sus trabajadores, Alejandro Hermida, cree que las nuevas medidas «están más orientadas a los que eran más permisivos, porque nosotros ya estábamos con el 50 % de aforo», indica. Antes del covid, este bar tenía 16 mesas, pero para respetar la distancia de seguridad han tenido que reducir a ocho, por lo que ya están a la mitad. En cuanto a la prohibición de servir en barra, Hermida apunta a que en el Pim Pan llevan tiempo sin hacerlo por una cuestión de precaución: «Los que toman café se quitan la mascarilla y muchas veces no se la vuelven a poner. Teniendo las copas aquí al lado es un riesgo que no queremos correr», explica.
Para muchos otros, con estas nuevas medidas las previsiones a partir de septiembre empeoran incluso más de lo esperado. Dany Cosme es el propietario del bar La Cueva y del café bar Trafalgar, ambos situados cerca de la Rúa do Franco, y reconoce que si la limitación de horarios ya les supuso un gran perjuicio, estas nuevas medidas ahondan más en el daño. «En agosto tuvimos pérdidas que rondaron el 70 %, tanto por la descenso de turistas como por la pérdida de clientes a partir de medianoche. Si ahora nos reducen el aforo a la mitad y nos quitan la barra, la situación será todavía peor. Los ingresos bajan, pero los gastos y los siete empleados hay que seguir pagándolos», concluye Cosme.
El alcalde llama a la tranquilidad y a la prudencia tras el anuncio de las restricciones de la Xunta
El alcalde de Santiago, Xosé Antonio Sánchez Bugallo, recibió durante la mañana de ayer las llamadas del conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña, y de la Xerencia del área sanitaria de Santiago para ser informado de la adopción de nuevas medidas en la ciudad. Después de conocerse las nuevas medidas decretadas por la Xunta a causa del covid, Bugallo pidió tranquilidad y prudencia por parte de la ciudadanía, además de apelar a su responsabilidad y cumplimiento de las nuevas normas.
«Desde o punto de vista municipal chamamos a todos a respectar as normas e a colaborar coa administración pública, tanto autonómica como local, para garantir as mellores condicións de seguridade», manifestó el alcalde. Por otro lado, Bugallo también explicó que algunos de los problemas que están detectando tienen origen en personas que vuelven a la ciudad una vez finalizadas sus vacaciones o que, aunque no viven en Santiago, desenvuelven actividades en la zona.
Cumplir las normas
Además, Sánchez Bugallo quiso poner de relevancia la necesidad de estar preparados y «psicoloxicamente dispostos» para afrontar limitaciones como las anunciadas ayer por la Xunta. Según el regidor compostelano, «é importante ser prudentes, responsables e cumprir as normas que se determinen» en todas las actividades que se realicen.