Los aparcamientos periféricos se caen de las prioridades para el 2021

r.m. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

El covid y las incertidumbres que lo rodean no los hacen tan necesarios de momento

02 ago 2020 . Actualizado a las 21:37 h.

Son tantas las incertidumbres en materia de movilidad que ha dejado el covid-19 a nivel nacional e internacional, y tantos los recelos que se abren con cada brote de entidad, que si algo tiene claro el gobierno municipal a estas alturas es que el Xacobeo del 2021 no se moverá ya en los parámetros que se preveían antes de la pandemia sanitaria del coronavirus.

El Ayuntamiento sabe que tiene un reto importante por delante con el 2021, porque la ciudad ha de estar preparada para lo que le llegue, aunque el gobierno local ya asume que el escenario no será aquel que apuntaba a la visita de nueve millones de personas. Las circunstancias han cambiado. Y las prioridades con el Xacobeo también. No el compromiso de la ciudad con el año santo, sino la prelación de servicios y equipamientos que había que disponer para ordenar esa llegada masiva de visitantes.

Si una prioridad había en ese sentido era la habilitación de amplias zonas de aparcamiento en la práctica totalidad de las entradas de la ciudad. La de mayor entidad estaría en Meixonfrío, aunque también se acondicionaría otra en San Lázaro y en la entrada del campus. Y se estaban buscando espacios en O Castiñeiriño y A Rocha.

Ya no son una prioridad porque ya no se consideran una «necesidade imperiosa» Pero ahora mismo esa red de estacionamientos de periferia ya no está ni en agenda. No se descartan para más adelante, pero ahora quedan aplazados. El covid y las limitaciones de movilidad que se han instalado con él (ya sean las sanitarias o las profilácticas que asuma cada uno) los han descabalgado del pelotón de cabeza. Ya no son una prioridad porque ya no se consideran una «necesidade imperiosa» para el 2021, según el alcalde, aunque ahora el tiempo para acondicionarlas sería más que escaso, por no hablar de la falta de fondos. Raxoi pensaba financiarlos con los remanentes de tesorería, pero se impuso la emergencia social del covid, y el destino del resto está pendiente de la negociación que mantienen la FEMP y el Estado. En cualquier caso, esa circunstancia también ha obligado a establecer nuevas prioridades. Y de disponer de esos fondos, la promoción económica estaría antes.

La dársena turística de Xoán XXIII no mueve ni el 10 % de lo que movió por estas fechas el año pasado

Y por mucho que se aspire, dentro de la incertidumbre, a que para la próxima primavera el turismo internacional remonte, ese no será específicamente el usuario natural de los aparcamientos periféricos, sino el turismo de proximidad y también un colectivo que ahora mismo es el menos dado a viajar y que en buena medida contribuyó a las cifras millonarias de visitantes del 2010, el de los mayores. Ahora mismo, la dársena turística de Xoán XXIII no mueve ni el 10 % de lo que movió por estas fechas el año pasado.

El entorno de la Catedral

«As previsións que se manexaban de que no 2021 se producira un fenómeno parecido ao 2010 hai que polo en reserva», afirma el alcalde, Xosé Sánchez Bugallo, quien, entre tanta incertidumbre, observa que si para el 2021 se recupera la actividad del 2019 ya sería excelente. Y, con el equipamiento «do 2019 nos arreglamos», dice en cuanto a recepción de visitantes. Para entonces funcionará también la dársena del Hórreo, aunque inicialmente será para trasladar allí las paradas del transporte metropolitano de A Rosa.

Las prioridades para la acogida, desbancadas las áreas de aparcamiento periférico por las secuelas del covid, ponen el foco ahora casi en exclusiva en la mejora del entorno de la Catedral: desde las iniciativas que incluye el programa comunitario Smartiago para la iluminación de monumentos hasta la dotación de aseos públicos en el Obradoiro y Praterías, además de la pequeña intervención ya anunciada en la plaza de Galicia para mejorar la distribución de usos en cuanto a movilidad. Y se mantendrán los programas de control de tráfico del Smartiago.

Un nuevo sistema de control de la movilidad aplicado en dos fases

En materia de movilidad, las actuaciones en las que trabaja el Concello llevan dos velocidades. Por un lado está la renovación y ampliación de los controles de acceso de vehículos con bolardos electrónicos y cámaras en el caso viejo, que está en licitación y cuyos primeros cambios deberían verse hacia finales de año o principios del 2021. Por el otro están los programas más innovadores que introducirán elementos de control inteligentes adaptados a las necesidades de la ciudad tanto en materia de movilidad, como de limpieza e iluminación. Estos requieren más tiempo, y aunque algunas de las aplicaciones puedan llegar para el Xacobeo, la mayoría de las relacionadas con la movilidad todavía tardarán más.

Pero las que no llevan incorporada la demanda de innovación ya permitirán un mayor control no solo de la movilidad en el casco histórico, sino para la organización y orientación (en función del nivel de disponibilidad de aparcamiento urbano) del tráfico que entre en la ciudad.