Compostela vuelve al trabajo con mascarilla

i. c. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Casi la tercera parte de las disponibles se repartieron el primer día en lugares de transporte

14 abr 2020 . Actualizado a las 23:41 h.

La vuelta al trabajo en la industria y -parcialmente- en la construcción devolvió ayer algo de vida a las calles de Santiago, quince días después del cierre total salvo actividades consideradas esenciales. Fue un movimiento de mascarillas, porque quien no disponía de ellas por las dificultades para encontrarlas en las farmacias, pudo recogerlas de manos de los policías nacionales y locales que, de 7 a 9 de la mañana, se apostaron en las estaciones del tren y de autobuses, en las paradas del bus más frecuentadas y en los accesos al polígono del Tambre. También las había todo el día en los buses urbanos a disposición de los usuarios, que dieron cuenta de ellas sin hacer demasiado caso del aviso de que se cogiera solo una por persona.

En total, los policías repartieron unas 2.500 mascarillas desechables y aproximadamente otro millar recogió la clientela de Tralusa, que pese a la reactivación de muchos centros de trabajo, sobre todo en el Tambre, sigue estando en niveles ínfimos respecto a lo que era normal antes de que la pandemia.

El Concello estudiará hoy si es necesario aumentar el número de servicios del bus urbano, que el último día laborable de Semana Santa, el miércoles 8, atendió una demanda de solo 1.538 personas, cuando lo normal era 27.500 de media diaria. Además, analizará los datos del tráfico en los dos o tres primeros días del nuevo período iniciado ayer -del lunes al miércoles de la semana pasada el descenso fue del 80 %-, si bien el edil de Mobilidade, Gonzalo Muíños dio por sentado que «hoy [por ayer] hay mucho movimiento». En todo caso, se mantienen los controles en los accesos de la ciudad a cargo de la Guardia Civil y la Policía Local, reclamando los justificantes de las empresas conforme los desplazamientos se realizan por motivos laborales, en las actividades autorizadas y siempre que no se pueda trabajar en casa.

Hoy sigue el reparto de mascarillas, con horario ampliado de 7 a 10 de la mañana, por parte de ambos cuerpos policiales, y seguirán estando disponibles en los buses mientras haya. Ayer, al empezar el reparto, la disponibilidad era de 8.000 enviadas por la Delegación del Gobierno y 5.000 más entregadas por la Xunta al Concello, que por su parte sigue adquiriendo lotes para uso de las personas que trabajan en los servicios municipales habituales y en los movilizados en los distintos frentes de lucha contra el coronavirus y de asistencia a las personas vulnerables. Raxoi también envió ayer 500 a la Praza de Abastos, solicitadas por los usuarios de casillas.

Con mascarillas y tratando de observar las normas de protección contra el COVID-19 se volvió a trabajar en las empresas del Tambre y en la construcción, si bien, en este caso, a medio gas, ya que el lunes de Pascua está marcado en rojo en el calendario de este sector. Para recuperar tiempo perdido, en algunas obras de edificación residencial, como la de Santiago Sur en Santa Marta, la de Arial en Volta do Castro o las de Julio Rey en el Restollal y la avenida de Barcelona, entre otras, volvieron a funcionar las máquinas. Los promotores tienen la esperanza de que el impacto del estado de alarma sea mínimo en las obras en marcha, que tienen prácticamente todo vendido, si bien algunos de ellos, como Óscar Rey, advierten que el rendimiento no es al 100 %, porque en las obras «tamén hai medo e desconfianza» por mucho que el sector trabaje con equipos de protección, observando las distancias de seguridad o sin compartir maquinaria. Sin embargo, sí temen, y mucho, el efecto a medio y largo plazo de la crisis económica que se derive de la pandemia sobre un sector que en Santiago había vuelto a coger velocidad de crucero.

Entre ayer y hoy se reanudan las obras públicas, salvo la del nudo de Concheiros

También el trabajo en las obras públicas se reanudó a medias ayer debido al día inhábil en el sector de la construcción. Algunas adjudicatarias acordaron con sus empleados o subcontratas empezar ayer, y así ocurrió con las actuaciones de la Xunta para la mejora del Camino Francés en el acceso del Monte do Gozo y en el tramo Tangueiro-San Lázaro, y del Inglés en el polígono del Tambre; así como en la ejecución de la senda peatonal y ciclista del tramo de la AC-543 entre A Barcia y Roxos. Hoy se retomará la construcción de la nueva estación de autobuses y de la pasarela peatonal del área intermodal, además de la mejora del Camino Portugués en Conxo.

Para el día 20 está previsto reanudar las obras de reurbanización del nudo de Os Concheiros en la avenida de Lugo, también del Camino Francés, que están paradas desde antes del cese por decreto iniciado el 30 de marzo y levantado ayer. En este caso, la inactividad prolongada se debe a que se produjo un positivo por coronavirus en una de las subcontratas de la adjudicataria.

La Xunta continuará hoy la construcción de los centros de salud de O Milladoiro y Melide.

Respecto a las obras del Concello, también se reanuda hoy la de Patio de Madres-Castrón Douro; la de Figueiras correspondiente al POS de la Diputación; y la de la calle Clara Campoamor. Además, Raxoi elaborará una normativa derivada del nuevo decreto, y el alcalde recordó que seguirán las obras de rehabilitación de edificios singulares (en la Catedral y Museo do Pobo se retomaron ayer), y en los compartidos solo se autorizarán las de urgencia o emergencia.